Sonreír siempre ha sido más fácil que explicar por qué estás triste. Que los días malos nos hagan más fuertes y los buenos más humildes. Lo que se ve por fuera es lo que los hace diferentes, pero lo que tenemos adentro es lo que nos hace únicos. Nuestros defectos y nuestras virtudes, las mostramos a quien realmente las quiere entender. La vida es un continuo torbellino de acontecimientos que a veces nos deja aturdidos y doloridos y otras veces nos hace emborrachar de felicidad.