Nunca Grites tu felicidad tan alto la envidia tiene el sueño muy liviano... La gente te pide críticas, pero en realidad sólo quiere halagos. Hoy vas a conquistar el cielo, sin mirar lo alto que queda del suelo. La primera virtud es frenar la lengua, y es casi un dios quien teniendo razón sabe callarse. El valor de una idea no tiene nada que ver con la sinceridad del hombre que la expresa.