Ofertas de luz y gas

C/ Calvario altar, PEDRO MARTINEZ

Yo tenía cinco años. La maestra escribió en la pizarra: "Todos los hombres son mortales". Sentí un enorme alivio, un gran regocijo.
Esa tarde, cuando salí del colegio, corrí a mi casa y abracé muy estrechamente a mi madre.
" ¡Qué suerte Mamita, tu no te vas a morir nunca!" le dije, arrebatadamente.
" ¿Qué?" preguntó mi madre, sorprendida.
Me separé apenas de ella y le expliqué:
-La maestra escribió en la pizarra que los hombres son mortales.
¡Y tú eres mujer!. Por suerte, eres mujer, dije...
Hoy cuando vayas por la calle regala sonrisas, regala alegrías, sí no hay respuesta regala más todavía.
Si se siembra la semilla con fe y se cuida con perseverancia, sólo será cuestión de tiempo recoger sus frutos
Como todos los soñadores, confundí el desencanto con la verdad.
El optimismo es la fe que conduce al éxito. Nada puede hacerse sin esperanza y confianza.