Compramos energía a futuro

PEDRO MARTINEZ (Granada)

Mi jardin adornado con mi ganchillo
Foto enviada por sensi

La risa no es un mal comienzo para la amistad. Y está lejos de ser un mal final.
A diferencia del mal, el bien es invisible.
No se puede calcular ni describir sin perder elegancia y significado.
Si con todo lo que tienes no eres feliz, con todo lo que crees que te falta para ser feliz, tampoco lo serás.
Nadie se nos montará encima si no doblamos la espalda.
POR LA IGUALDAD
Toda la sangre es roja-Ndjock Ngana
¿Quién puede derramar
sangre negra
sangre amarilla
sangre blanca
medio-sangre?
La sangre no es india, polinesia o inglesa.
Nadie ha visto jamás
sangre judía ... (ver texto completo)
La memoria es como el mal amigo; cuando más falta te hace, te falla.
Quien vive en paz consigo mismo, vive en paz con el universo.
El problema de ayudar mucho a la gente, es que el día que dejas de hacerlo el malo eres tú.
UN TRAJE A MEDIDA AJENA

Estaba un hombre probándose un traje y, mirándose al espejo, vio que la parte baja del chaleco era desigual. «No se preocupe por eso –le dijo el modista–. Sujete el extremo más corto con la mano izquierda y nadie lo notará». Lo hizo, pero se percató de que la solapa de la chaqueta no estaba plana. «Eso no es nada –aseguró el sastre–. Doble un poco la cabeza y alísela con la barbilla».
El cliente lo hizo, y entonces vio que la costura interior de los pantalones era corta ... (ver texto completo)
La suerte es cuando la oportunidad llama a tu puerta y tú respondes.
El pozo de las hierbas mágicas

En la China existen muchas viejas historias que han sido traspasadas de generación a generación. Hoy te contamos una de estas historias sobre un pozo, custodiado por un dragón, donde crecían hierbas mágicas.
Hubo un año en la zona de Zhenghe, al sur de China, en que el tiempo fue muy seco. No llovía y la sequía hizo brotar la enfermedad Wenyi, causando muchos muertes. En la montaña de Donggong había un pozo con un dragón. Al lado del pozo crecen hierbas mágicas ... (ver texto completo)
Cuantas más reglas tengas de cómo tiene que ser la vida para que seas feliz, menos feliz vas a ser.
LAS VARAS

Un padre de familia recordaba siempre a sus dos hijos que mantuvieran una buena relación entre ellos. Sin embargo, los niños, que eran tan revoltosos como desobedientes, no le escuchaban y andaban siempre peleándose, acusándose e insultándose reiteradamente. Harto de la situación, un buen día el padre cogió unas cuantas varas de fresno, las juntó en un solo bloque, lo ató con una pequeña cuerda y se lo dio a sus hijos. «Quiero que rompáis este manojo de varas», les ordenó. Muy a pesar ... (ver texto completo)
Las emociones no tienen medida, no tienen frontera, no tienen tiempo..
La peor ceguera es la mental, que hace que no reconozcamos lo que tenemos por delante.