LA MUJER QUE COCÍA PAN ECOLÓGICO PARA QUIENES COMÍAN DE LA BASURA
Su nombre era Ángela Estrada.
Cada madrugada, cuando la ciudad aún dormía, ella encendía su horno pequeño y amasaba pan.
No lo hacía para vender.
No lo hacía para su familia.
Horneaba pan para la gente que rebuscaba entre los cubos de basura.
Decía:
—No puedo cambiar el mundo, pero puedo cambiar una mañana.
El pan que hacía era sencillo: harina integral, semillas, un poco de miel cuando había. ... (ver texto completo)
Su nombre era Ángela Estrada.
Cada madrugada, cuando la ciudad aún dormía, ella encendía su horno pequeño y amasaba pan.
No lo hacía para vender.
No lo hacía para su familia.
Horneaba pan para la gente que rebuscaba entre los cubos de basura.
Decía:
—No puedo cambiar el mundo, pero puedo cambiar una mañana.
El pan que hacía era sencillo: harina integral, semillas, un poco de miel cuando había. ... (ver texto completo)
