Hoy montamos el Belén, dos mil doce, LIMONES

(2 de Diciembre de 2012)
Palabras del Papa... los que eran de Huelva o al menos salieron de allí eran los reyes magos.
Todos los años recibo dos postales navideñas por correo ordinario, una es de una amiga que tengo desde la EGB que se hizo misionera, que estuvo en el Congo y ahora en México, otra de un tío mío aficionado a la pintura.

La postal de mi amiga siempre es artesanal, con cartulina sobre la que hace un pequeño collage de la sagrada familia antes de raza negra, ahora indígena, con motivos étnicos y alguna vez circunscritos en un pétalo de rosa.
La de mi tío siempre es más laica, y se limita a un dibujo...
La leyenda de la estrella de Belén, según propuso Kepler ya en 1606, pudo basarse en el efecto de la rara triple conjunción de la Tierra con los planetas Júpiter y Saturno, estando el sol pasando por Piscis, que se dio en el año 7 antes de Cristo.
La fecha elegida por Roma en el Siglo IV para conmemorar el nacimiento de Jesús (25 de diciembre) no es cierta.
Su elección no está del todo clara. Parece ser que se escogió este día por su coincidencia con la fiesta del nacimiento del sol invicto, celebrada poco después del Solsticio de invierno. Cristo, el Sol simbólico de la religión cristiana, heredó así su cumpleaños de los cultos paganos de Roma.
Una vez montado el Belén nos falta el pascuero, le llamamos también pilisétia o "planta de los equívocos", su verdadero nombre es poinsettia ¿razones? varias.
No viene de la Isla de Pascua como se cree, sus pétalos no son rojos, sino amarillos y porque su nombre Poinsettia, no procede del latín, sino de su protector, que la trasladó de su Méjico natal a Estados Unidos. Fue Joel Roberts Poinsett, el primer embajador americano en Méjico.