Saludos a todos los guartuneros de buen corazón, que los hay en abundancia por todo el mundo, saludos a antonio el civil a los buenos cantes en el
bar del tarugo, a la gracia y al habla guartunera, a la sabiduría y refranes del pimiento, a la voz del garabito, a las tapas del borrego, a las famosas perdices de reclamo de esa tierra, a todos los que fueron y son mis
amigos, a todos los que me acogieron durante siete años, y a la mayoría de sus habitantes que me es imposible nombrar, espero volver
... (ver texto completo)