Los chinos fueron la excepción. Después de que los buscadores blancos abandonaran la áreas de minería de superficie, muchos mineros chinos tomaron esos lugares e intentaron hacer que funcionaran de nuevo. Grandes masas de gente fueron cambiando de un punto al otro, repitiendo el ciclo ‘de crecimiento y explotación’, que a menudo dejaba pueblos fantasmas y tierras arruinadas. El descubrimiento del Filón Comstock –que tenía grandes cantidades de plata-, resultó en el surgimiento de las ciudades de Virginia, Carson City y Silver City. La riqueza de plata, más que la del oro, aceleró la maduración de San Francisco en 1860 y ayudó al surgimiento de algunas e sus familias más ricas.