FREILA (Granada)

Al médico, confesor y letrado, no le traigas engañado.

En una reunión en casa de unos amigos, una dama le pregunta a otro invitado:
¿Qué edad me calcula usted?
Y él responde:
Si me fijo en su cutis, 18 años. Su cabello me dice que tiene 17. Los ojos corresponden a una muchacha de 20...
La dama, encantada, comenta:
¡Oh! ¡Que amable es usted!
Pero él continúa diciendo:
¡Un momento, aún me falta sumar!

En cierto pueblo en los EEUU habia unas curiosas señales de trafico que prohibian circular a 29 millas por hora en vez de las 30 habituales.
La razon? Si un policia ponia una multa a alguien por circular a mas de 30 millas por hora en zona urbana, que es una infraccion estatal, el dinero de la multa iba a parar a las arcas del estado; pero al poner una multa por ir a mas de 29 millas por hora, que es una ley local, el dinero acababa en el ayuntamiento.

Herrero

El herrero era aquella persona que mediante su forja, yunque y martillos elaboraba objetos de metal, comúnmente acero e hierro, de necesidad para toda la sociedad. Entre esos objetos se encontraban no sólo herramientas, campanas, armas y artículos de cocina, si no que en muchas ocasiones también realizaban artículos decorativos muebles e incluso esculturas.

Con la llegada de la revolución industrial, el herrero pasó de estar en todos los pueblos a estar únicamente en determinadas poblaciones, ... (ver texto completo)

Nunca somos tan felices ni tan infelices como pensamos.

El hombre feliz es más raro que un cuervo blanco.

Todo se soporta en la vida, con excepción de muchos días de continua felicidad.

Bebed porque sois felices, pero nunca porque seáis desgraciados.

Las personas felices no tienen historia.

Nadie puede ser feliz si no se aprecia a sí mismo.

Si el dinero no te da la felicidad devuélvelo.

No hay deber que descuidemos tanto como el deber de ser felices.

Aquí... completamente de acuerdo. ¿Pero quién nos enseña a vivir? ¿Los palos?

Un saludo Antonio.

hola amiga que tal estas
tienes toda la razon, los palos nos enseñan a vivir
un saludo tambien para ti y feliz noche

No está la felicidad en vivir, sino en saber vivir.

Aquí... completamente de acuerdo. ¿Pero quién nos enseña a vivir? ¿Los palos?

Un saludo Antonio.

Cualquier hombre puede llegar a ser feliz con una mujer, con tal de que no la ame

¡Graciosillo!