Fíjate, Pepe, que tú ni te acordarás, cuando llegó la televisión a Escúzar, los primeros en comprarla fueron Pedro Moreno, de. Rafael el Cura y el bar de Confite, luego JORGE. Al primero, no podías;al segundo, entrabas gratis;y al tercero, tenías que pagar una peseta. Hasta le pusieron un papel transparente azulado para que se vieran menos "tostones", chispas...Claro, la gente se peleaba por entrar en la casa del cura, que era gratis. También recuerdo que nos puso diapositivas de sus andanzas en Colombia, con sotana blanca, allí en Bogotá. Era un poco perezoso de. Rafael, no se levantaba hasta dar las treinta, y aparecía por la sacristía con un olor a colonia exagerado. Muchas veces traía a su madre, buenísima mujer, a su criada y a su sobrino Jacinto, hijo de su hermano del mismo nombre. Una vez, me acuerdo, que Luisa, la criada, dedicó un disco en la Emisora parroquial como locutora y anunció: "Piropos al sacramento, por Paco de Montefrío", y tuvo que corregir el Cura:"Piropos al Sacromonte, por Paco de...". En aquel tiempo este cura fue tachado de comunista, y al final hubo de marcharse por la fuerza. La emisora empezaba todos los días sobre las 12 de la mañana con música de la Sinfonía Pastoral de Beethoven, y , entre sonido y sonido, salían al aire estas palabras:"Transmite la emisora parroquial de Escúzar, puesta al servicio del pueblo, al servicio de la verdad, para elevar el ambiente campesino en el orden cultural y religioso". Las canciones que en el programa de discos dedicados salían a las ondas eran, por ejemplo, El Himno de los voluntarios, que era de Rosendillo el Comandante, Mulero y Campanillero, la Chulapona de Madrid, el fuego de la cortinita, todas de Manolo Escobar, las Palmeras de Alberto Cortez, canciones de Lucho Gatica etc. Los locutores eran Cecilito, Victorino, Manolico el del Callejón, Evaristo Gloria, el Cura...Tenía corresponsales en todos los pueblos del Temple e incluso, en Láchar, el Turro, en fin...
Probablemente tú ni te acuerdes de estas cosas. En una ocasión, con motivo de un partido de Escúzar contra el Recreativo de Granada, dicen que vino Pirri, y les acompañó la tuna del Colegio Isabel la Católica de Granada. Entonces jugaban el Niño Claudio, El Chato Tite, Paco López, el Canillo, Manolo el Guarda, Manolito de la Apolonia, los de la Genara, Miguelín, Cecilito, Manolo el de la Ignacia, el Gallo, unos jugadores extraordinarios que dejaban la piel en el campo. Su camiseta, verdinegra, la sentíamos como propia. El campo de las Alcarceleras se llenaba de gentío cuando venían equipos de renombre, como el Pulianas, El Gabia Grande, el bueno, no el Atlético Bicicleta, la Malahá, con aquel portero tan excelente, Papo.Arbitraba Rogelio el de Gloria o el Titi, de Gabia.
Probablemente tú ni te acuerdes de estas cosas. En una ocasión, con motivo de un partido de Escúzar contra el Recreativo de Granada, dicen que vino Pirri, y les acompañó la tuna del Colegio Isabel la Católica de Granada. Entonces jugaban el Niño Claudio, El Chato Tite, Paco López, el Canillo, Manolo el Guarda, Manolito de la Apolonia, los de la Genara, Miguelín, Cecilito, Manolo el de la Ignacia, el Gallo, unos jugadores extraordinarios que dejaban la piel en el campo. Su camiseta, verdinegra, la sentíamos como propia. El campo de las Alcarceleras se llenaba de gentío cuando venían equipos de renombre, como el Pulianas, El Gabia Grande, el bueno, no el Atlético Bicicleta, la Malahá, con aquel portero tan excelente, Papo.Arbitraba Rogelio el de Gloria o el Titi, de Gabia.