Vá para Julio Manjón... ¡Sonria por favor!
Un pobre paisano de una aldea gallega estaba acostado en su cama, con una enfermedad terminal, ya que le quedaban pocas horas de vida, de repente le llega el aroma de una comida divina. Lo úniquito que a él le apetecia comer en esa situación fatídica en la que se encontraba.. una empanada de carne recién hecha. Para él lo mejor del mundo entero y además hecha por su mujer Cirila.
Haciendo un esfuerzo sobrehumano y casi arrastrandose logra llegar a la cocina, iba siguiendo el aroma de masa, carne y cebolla. Por fín llega a la mesa y allí estaban las suculentas empanadas. Doraditas.. recién hechas.. calentitas. El creyó que su esfuerzo sobrehumano había valido la pena, sería su último deseo y su última comida.
Echa mano a tan suculento manjar y de pronto ¡zas... zas.. zas..! Siente unos fuertes golpes en la cabeza que casi le hacen perder el sentido y caer al suelo.
Vuelve la cabeza y vé a su mujer Cirila con un cucharón de hierro en la mano y mirandoló amenazadoramente.. Vá ella y le dice al pobre gallego....
¡Ni se te ocurra, que son para el velatorio!
Un pobre paisano de una aldea gallega estaba acostado en su cama, con una enfermedad terminal, ya que le quedaban pocas horas de vida, de repente le llega el aroma de una comida divina. Lo úniquito que a él le apetecia comer en esa situación fatídica en la que se encontraba.. una empanada de carne recién hecha. Para él lo mejor del mundo entero y además hecha por su mujer Cirila.
Haciendo un esfuerzo sobrehumano y casi arrastrandose logra llegar a la cocina, iba siguiendo el aroma de masa, carne y cebolla. Por fín llega a la mesa y allí estaban las suculentas empanadas. Doraditas.. recién hechas.. calentitas. El creyó que su esfuerzo sobrehumano había valido la pena, sería su último deseo y su última comida.
Echa mano a tan suculento manjar y de pronto ¡zas... zas.. zas..! Siente unos fuertes golpes en la cabeza que casi le hacen perder el sentido y caer al suelo.
Vuelve la cabeza y vé a su mujer Cirila con un cucharón de hierro en la mano y mirandoló amenazadoramente.. Vá ella y le dice al pobre gallego....
¡Ni se te ocurra, que son para el velatorio!
muy bueno maru tus niñas y el bebe estaran preciosos vi las fotos
Loli te hemos echado mucho de menos, ya te llamaré cuando estés más tranquilita. ¡Un beso carretereña guapa!
gracias chocho