¡Anda! Mirando por aquí fotos me acabo de acordar del pájaro de mi primo Cipriano.
Resulta que mi primo Cipriano hizo una vez un viaje en avión, pero por poco no puede ir, porque tenía un canario y no sabía el pobre dónde dejarlo. Total que como él tenía ganas de viajar decidió llevarse al canario a sabiendas de que en los aviones no entran pájaros, el se escondió el suyo en el bolsillo del pantalón y se embarcó con él tan campante.
En eso que cuando ya estaba volando por los cielos, el Cipriano se durmió y el pajarito aburrio se dedicó a romper la tela del bolsillo de tal forma que asomó por la portañica. Unas monjas que estaban en los asientos de al lado se quedaron muy extrañadas al ver aparecer aquello y despertaron al Cipriano..."Oiga, oiga, señor, nosotros no entendemos nada de esto pero nos parece ver que se le ha roto a usted un huevo"
Resulta que mi primo Cipriano hizo una vez un viaje en avión, pero por poco no puede ir, porque tenía un canario y no sabía el pobre dónde dejarlo. Total que como él tenía ganas de viajar decidió llevarse al canario a sabiendas de que en los aviones no entran pájaros, el se escondió el suyo en el bolsillo del pantalón y se embarcó con él tan campante.
En eso que cuando ya estaba volando por los cielos, el Cipriano se durmió y el pajarito aburrio se dedicó a romper la tela del bolsillo de tal forma que asomó por la portañica. Unas monjas que estaban en los asientos de al lado se quedaron muy extrañadas al ver aparecer aquello y despertaron al Cipriano..."Oiga, oiga, señor, nosotros no entendemos nada de esto pero nos parece ver que se le ha roto a usted un huevo"