Uno que iba por la calle dando tumbos con una borrachera bastante importante, vamos que se había bebido el solito medio almacén de whisky de Segovia., se despista el pobre hombre y equivocado se mete en una iglesia donde se estaba celebrando un funeral. Al ver a tanta gente junta y tantas velas se creyó que era un cumpleaños y empezó a cantar... cumpleaños feliz, cumpleaños feliz,, te deseamos.... ¡Callesé Vd. no vé que estamos en la iglesia y en un funeral... ¡Ah perdón! ya decía yo que la tarta era muy grande..