A un cura malagueño der Palo, socio der
Málaga, lo destinan a una
parroquia de
Sevilla. El cura mu ofendio le dice al Obispo que él no se puede ir pa Sevilla porque le tiene tirria a los sevillanos, pero el Obispo lo convence y se va.
El primer domingo to los feligreses van a la
iglesia pa conosé al nuevo párroco, comienza la misa y cuando llega a la homilía el sacerdote dice:
Queridos hermanos, hoy voy a hablaro de Sansón y Dalila; Sansón...., un hombre fuerte, un hombre enamorao duna mujé,
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