Un misionero llega a una Tribu de Africa negra y decide convertir a los miembros de la tribu. Para ello les dirige una pratrica en los siguientes terminos:
Debeis amar a vuestros enemigos
Los guerreros de feroz aspecto agitan sus lanzas y cantan a
coro.. ¡Hussanga, hussanga!
Al que os abofetee le ofreceis la otra mejilla.
¡Hussanga!
Si vuestras manos os ofrecen motivo de pecado, cortaroslás.
¡Hussanga, hussanga!
¡Bueno para ser el primer día todo a ido bién! ya está bién mañana prepararé
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