CORDOBA: CORDOBA- (CAPITULO 7ª)...

CORDOBA- (CAPITULO 7ª)

5ª) Sus baños y jardines

Los baños (hamman) se derivan de las termas romanas y eran lugares de encuentro para la convivencia ciudadana y destacaban sus cúpulas adornadas con lucernarios de cristales de colores que permitían la salida del vapor de agua creando un ambiente calmado y distendido.
El ciclo era similar a las termas romanas y el público accedía al hamman desde un vestidor donde se despojaba de la ropa y pasaban primero a una sala de agua tibia y después a otra sala con agua caliente, procedente de una caldera. Los bañistas tendidos junto al muro recibían masaje y eran enjabonados por auxiliares del baño que vertían sobre ellos agua caliente.
Los baños eran un lugar de reunión donde se comentaban diversos temas: política, filosofía o dedicarse a la crítica social.
Para evitar el contacto, los hombres acudían por la mañana y las mujeres por la tarde. Estas últimas eran atendidas por peinadoras que se dedicaban: a depilar, perfumar el cabello y acicalar con afeites y otros ungüentos a las mujeres.
En Córdoba existía una de las entradas, conocida como la Puerta de los Jardines, en el extremo oeste de la Medina con zonas de extensos jardines donde abundaban los naranjos, azufaifas, cipreses y palmeras combinados con jazmines y un arriate de alhelíes.
Se percibía en este lugar un exquisito olor al azahar de los limoneros y existían también acequias que distribuían el agua hasta acumularla en las albercas.

Julio Reyes Al-Mayriti