Formada como florista en Sydney y Nueva York, la australiana Ruby Barber lleva el
arte en las venas y en su propia geografía sentimental: abrió su primer estudio bajo el nombre Mary Lennox en el
edificio donde antes estuvo el primer estudio de su padre, fotógrafo, y la primera galería de su madre, artista contemporánea. Para redondear la magia, dicho edificio se encontraba entre las
calle Mary y Lennox, y Mary Lennox es la protagonista de su libro favorito de la infancia, El
jardín secreto, uno de los grandes clásicos de la literatura infantil inglesa y un canto a la fuerza de la
naturaleza.