Manuela, no sé qué decirte al respecto, vengo de hacer una gestión y me han preguntado la edad, para mí que el subsodicho se barruntaba algo, me ha parecido ver una sonrisa sibilina en su rostro y no le he contestado, sólo le he alargado el DNI para que se fastidiara y tuviera que echar cuentas.
Un abrazo.
Un abrazo.