Restos de la vieja almazara de Sta. María de Nieva (Huercal-Overa, Pcia. de Almería, Andalucía, España). Con estos antiguos instrumentos -rulos de piedra, prensa y no mucho más-, la oliva era convertida en aceite. Funcionó hasta aproximadamente el año 1950, por lo menos, es lo que recuerdo yo.
Estoy seguro que como yo, hay varios en Nieva o de Nieva, que recuerdan cuando en los días de invierno, y cuando funcionaba la almazara de Agustín, pasábamos largos ratos al calorcito de la sepia ardiendo, comiendo una rebanada de pan tostado mojada en aceite recién vertido en el pilón. ¿Se acuerdan? Pues así lo recuerdo yo.
Según el dicho popular, con el tiempo y una caña, hasta los verdes caen, pues digo yo que con algunos años y un poco de memoria, a estos hierros y piedras se los puede ver trabajando, sentado al calor del fuego de la sepia ardiendo y comiendo una rebanada de pan mojada en el aceite recién sacado.
También dice el Tango: ¿te acuerdas hermano, que tiempos aquellos? Eran seis, ocho o diez años, que no volverán.
Estoy seguro que como yo, hay varios en Nieva o de Nieva, que recuerdan cuando en los días de invierno, y cuando funcionaba la almazara de Agustín, pasábamos largos ratos al calorcito de la sepia ardiendo, comiendo una rebanada de pan tostado mojada en aceite recién vertido en el pilón. ¿Se acuerdan? Pues así lo recuerdo yo.
Según el dicho popular, con el tiempo y una caña, hasta los verdes caen, pues digo yo que con algunos años y un poco de memoria, a estos hierros y piedras se los puede ver trabajando, sentado al calor del fuego de la sepia ardiendo y comiendo una rebanada de pan mojada en el aceite recién sacado.
También dice el Tango: ¿te acuerdas hermano, que tiempos aquellos? Eran seis, ocho o diez años, que no volverán.
