Si me permite Don Francisco, esta preciosa foto que le agradezco sinceramente, me sugiere una reflexión personal. La educación de un pueblo y sus gentes siempre supo conservar el contenido de esta imagen durante muchos siglos: en un pasado no muy lejano fueron tierras en que se explotaba el esparto y el palmito. En sus aguas gentes humildes y sencillas capturarían con sus artes de pesca una riqueza que siempre se mantuvo. Y a los pies del Cerrico Romero, el vergel de una rica huerta regada por sus norias, siempre llena de cereales, frutas y hortalizas. Desde esos cerros muchas personas, entre ellas mis antepasados, alimentarían de historia este paraje que usted, como siempre perfectamente documentado, nos ha reflejado en su estudio de las canteras de adoquines, enseñandonos a todos. Pero lo que parecía la panacea que era la declaración en su día de Parque Natural, permitió en sus primeros momentos que algunos de sus dirigentes en nombre de la Administración destruyeran elementos característicos en el entorno de esta imagen, arrasando con todo. Nunca se entenderá por qué razón se derribaron cortijos emblemáticos o por qué no se tomaron medidas para evitar el derribo de muchos otros.
Espero que algún día al menos públicamente se reconozcan los errores de esta Administración y se empeñen en reparar tanto daño que han hecho en esta tierra, y en particular a mi familia.
En esta envidiable vista con que usted nos deleita de El Playazo, Cerro La Molata, Cerro la Molatilla, Cerro Negro, San Pedro y su Rellana y adivinando la Cueva de Las Palomas, El Puntón, El Cuervo, Las Negras, Cortijo Ricardillo, El Caletón, Cala Hernández, Pechos de la Mina: Es el Paraíso de todos mientras todos, gobernantes y gobernados queramos, aunque sea con un poquito de educación.
Pero hoy día todos estamos siendo testigos de cómo insosteniblemente, en el ámbito de las competencias de las Administraciones se está sobreurbanizando Las Negras. Pués parece que no hubo bastante con San José. Y de la falta de concienciación social, las ratas y basuras de San Pedro son un triste testigo de ello. Salvemos entre todos lo que nos queda virgen de esa cala en el primer plano de esa imagen: El Playazo.
Un saludo a los amantes de esta tierra.
Espero que algún día al menos públicamente se reconozcan los errores de esta Administración y se empeñen en reparar tanto daño que han hecho en esta tierra, y en particular a mi familia.
En esta envidiable vista con que usted nos deleita de El Playazo, Cerro La Molata, Cerro la Molatilla, Cerro Negro, San Pedro y su Rellana y adivinando la Cueva de Las Palomas, El Puntón, El Cuervo, Las Negras, Cortijo Ricardillo, El Caletón, Cala Hernández, Pechos de la Mina: Es el Paraíso de todos mientras todos, gobernantes y gobernados queramos, aunque sea con un poquito de educación.
Pero hoy día todos estamos siendo testigos de cómo insosteniblemente, en el ámbito de las competencias de las Administraciones se está sobreurbanizando Las Negras. Pués parece que no hubo bastante con San José. Y de la falta de concienciación social, las ratas y basuras de San Pedro son un triste testigo de ello. Salvemos entre todos lo que nos queda virgen de esa cala en el primer plano de esa imagen: El Playazo.
Un saludo a los amantes de esta tierra.