Las personas somos por naturaleza soñadoras y los buenos recuerdos te hacen pasar ratos muy agradables, por ello leyendo el mensaje de Ramón, echo la mente a volar y me viene a la memoria el Cortijo de Los Méndez, que por cierto vivía en él una muchacha que era preciosa y a la que veía cada vez que bajaba al Playazo, que lo era a diario y un buen día por las circunstancias de la vida tuvo que irse toda la familia a Cataluña y nunca más volví a ver a sus moradores.
El Guardia joven del que escibe Ramón que lo veía bajar en bicicleta con la caña hacía El Playazo para pescar, hay un alto porcentaje de posiblidades que fuera Rafael, un cordobés al que le gustaba al igual que a mi pescar y la verdad es que se nos pasaba la noche muy rápida, estando todo el tiempo entretenidos.
Arévalo que gran persona, muy inteligente pués hablaba varios idiomas y buén vecino de Rodalquilar, pués cuando llegó destinado venía de Madrid, donde los médicos le recomendaron la zona para su curación y como sabeis le fué de maravillas, ya que el Señor se lo llevó por la edad, con lo el clima de la zona era y es muy sano, pués yo que padecía un poco de estómago, había un pozo en el Cortijo del médico y el agua que bebía procedia de dicho pozo y milagro me desaparecieron los dolores.
El Manuel Méndez que yo conocí, fué un Teniente que relevé en Carboneras en el año 88 y cuando hablamos de Rodalquilar me dijo que había vivido en Los Méndez y una vez efectuado el relevo, seguimos la amistad desde su nuevo destino en Almería, pero al ascender a Capitán le perdí la pista. Del Cortijo siempre que pasaba por la puerta, miraba hacía él y me parecía extraño verlo sin habitantes, pero eso fué muy normal que en esa época las personas buscaran el bienestar de su familia.
Durante aquel tiempo se hicieron buenas amistades, que a día de hoy aún se conservan, pués no en vano conviviamos muy entrañablemente los unos con los oros, prueba de ello es la amistad acrisolada que hay entre Tarifa y esposa, Morente y esposa y mi mujer y yo, ya que los tres matrimnios tenemos algo en común que nos gusta Rodalquilar y sus alrededores y cuando nos reunimos lo pasamos muy bién contando nuestras vivencias en aquel tiempo.
También recuerdo como en el 67 casi todos compramos una Vespa Sprint 150, con la que nos íbamos a Las Hortichuelas Bajas, a Casa de La Señora Inocencia para comernos unos conejos que ella se encargaba de preparar y posteriormente en el local el hijo de ésta ponía unos discos, apareciendo posteriormente las madres con sus respectivas hijas para comenzar el baile, la verdad es que tanto los unos como los otros lo pasamos bién.
No quiero acabar este relato, sin agradecer la gran lección de Historia que nos ha dado nuestro amigo Ginésico, pués enriquese mucho leer su escrito y aprendes algo mas de la zona.
Un saludo muy cordial para todo El Foro y hasta otra.
El Guardia joven del que escibe Ramón que lo veía bajar en bicicleta con la caña hacía El Playazo para pescar, hay un alto porcentaje de posiblidades que fuera Rafael, un cordobés al que le gustaba al igual que a mi pescar y la verdad es que se nos pasaba la noche muy rápida, estando todo el tiempo entretenidos.
Arévalo que gran persona, muy inteligente pués hablaba varios idiomas y buén vecino de Rodalquilar, pués cuando llegó destinado venía de Madrid, donde los médicos le recomendaron la zona para su curación y como sabeis le fué de maravillas, ya que el Señor se lo llevó por la edad, con lo el clima de la zona era y es muy sano, pués yo que padecía un poco de estómago, había un pozo en el Cortijo del médico y el agua que bebía procedia de dicho pozo y milagro me desaparecieron los dolores.
El Manuel Méndez que yo conocí, fué un Teniente que relevé en Carboneras en el año 88 y cuando hablamos de Rodalquilar me dijo que había vivido en Los Méndez y una vez efectuado el relevo, seguimos la amistad desde su nuevo destino en Almería, pero al ascender a Capitán le perdí la pista. Del Cortijo siempre que pasaba por la puerta, miraba hacía él y me parecía extraño verlo sin habitantes, pero eso fué muy normal que en esa época las personas buscaran el bienestar de su familia.
Durante aquel tiempo se hicieron buenas amistades, que a día de hoy aún se conservan, pués no en vano conviviamos muy entrañablemente los unos con los oros, prueba de ello es la amistad acrisolada que hay entre Tarifa y esposa, Morente y esposa y mi mujer y yo, ya que los tres matrimnios tenemos algo en común que nos gusta Rodalquilar y sus alrededores y cuando nos reunimos lo pasamos muy bién contando nuestras vivencias en aquel tiempo.
También recuerdo como en el 67 casi todos compramos una Vespa Sprint 150, con la que nos íbamos a Las Hortichuelas Bajas, a Casa de La Señora Inocencia para comernos unos conejos que ella se encargaba de preparar y posteriormente en el local el hijo de ésta ponía unos discos, apareciendo posteriormente las madres con sus respectivas hijas para comenzar el baile, la verdad es que tanto los unos como los otros lo pasamos bién.
No quiero acabar este relato, sin agradecer la gran lección de Historia que nos ha dado nuestro amigo Ginésico, pués enriquese mucho leer su escrito y aprendes algo mas de la zona.
Un saludo muy cordial para todo El Foro y hasta otra.
