Estimado amigo Leocadio:
La naturaleza es sabia…… y a la inmensa mayoría de niños de Rodalquilar, “ella”, nos quitó a nuestros queridos padres. Por tu edad podrías ser nuestro padre, pero gracias a Dios la naturaleza quiere que sigas con nosotros. No seas tú, el que quieras (abandonarnos); por la amistad que a pesar de no conocernos nos une, te ruego reconsideres tu decisión, y vuelvas a ésta casa con los tuyos. Mi corazón me dice, que seguirás leyendo nuestros recuerdos, pues es mucho lo que quieres a aquel (rincón) y tus dedos (teclearán) diariamente a la puerta de ésta casa para saber, que dicen sus moradores!
Aproximadamente, hace tres años fuiste tú el que abrió la puerta de ésta casa, y con ello, se abrieron las puertas de todas aquellas casas que llevaban cuarenta y tantos años cerradas a cal y canto, y un día, en nuestras visitas a Pueblos de España, descubrimos que un tal Leocadio (el canario) ha abierto la puerta/s de ésta casa y con ello nuestra memoria pudo meterse en ellas y recordar nuestros bonitos recuerdos de nuestros años vividos en ellas junto a nuestros padres y hermanos; recuerdos, que todos de una manera u otra, queremos comentarlos en nuestros escritos, porque muchos de ellos fueron vividos por muchos de ésta casa y que quizás lo tuviésemos en el olvido y al leerlo, se nos escapa una sonrisa de felicidad. Gracias Leocadio.
Tus recuerdos en cinco años -50-55- vividos en el Paraíso, no pueden ser tantos como los nuestros que vivimos más años en él y sobre todo en la época (esplendorosa) de aquel pueblo, no obstante, espero ver aunque sea esporádicamente, tus mensajes en ésta, TU CASA.
Si en alguno de mis mensajes hay alguna palabra por la cual alguien pudiese sentirse ofendido, ni ha sido ni será nunca mi intención, sino simplemente no saber el significado de esa palabra, por mi ignorancia.
Tu AMIGO
La naturaleza es sabia…… y a la inmensa mayoría de niños de Rodalquilar, “ella”, nos quitó a nuestros queridos padres. Por tu edad podrías ser nuestro padre, pero gracias a Dios la naturaleza quiere que sigas con nosotros. No seas tú, el que quieras (abandonarnos); por la amistad que a pesar de no conocernos nos une, te ruego reconsideres tu decisión, y vuelvas a ésta casa con los tuyos. Mi corazón me dice, que seguirás leyendo nuestros recuerdos, pues es mucho lo que quieres a aquel (rincón) y tus dedos (teclearán) diariamente a la puerta de ésta casa para saber, que dicen sus moradores!
Aproximadamente, hace tres años fuiste tú el que abrió la puerta de ésta casa, y con ello, se abrieron las puertas de todas aquellas casas que llevaban cuarenta y tantos años cerradas a cal y canto, y un día, en nuestras visitas a Pueblos de España, descubrimos que un tal Leocadio (el canario) ha abierto la puerta/s de ésta casa y con ello nuestra memoria pudo meterse en ellas y recordar nuestros bonitos recuerdos de nuestros años vividos en ellas junto a nuestros padres y hermanos; recuerdos, que todos de una manera u otra, queremos comentarlos en nuestros escritos, porque muchos de ellos fueron vividos por muchos de ésta casa y que quizás lo tuviésemos en el olvido y al leerlo, se nos escapa una sonrisa de felicidad. Gracias Leocadio.
Tus recuerdos en cinco años -50-55- vividos en el Paraíso, no pueden ser tantos como los nuestros que vivimos más años en él y sobre todo en la época (esplendorosa) de aquel pueblo, no obstante, espero ver aunque sea esporádicamente, tus mensajes en ésta, TU CASA.
Si en alguno de mis mensajes hay alguna palabra por la cual alguien pudiese sentirse ofendido, ni ha sido ni será nunca mi intención, sino simplemente no saber el significado de esa palabra, por mi ignorancia.
Tu AMIGO
