Ver el foro de PALOMERO

Estimados amigos, les escribo desde Costa Rica con el fin de aclararles como fue que se dio la sucesión del título del Marquesado de Santa Cruz de Paniagua hasta llegar a Don Alejandro de Calonge y Hoces, actual titular.--Tal como ya lo ha dicho Sixto, fue inicialmente al Cap. Pedro Hernández Paniagua de Loaisa a quien se le otorgó el rango de I Señor de Santa Cruz de las Cebollas, este señorío fue pasando por sucesión a de su hijo Gabriel, a su nieto Antonio, a su bisnieto Pedro y a su tataranieto ... (ver texto completo)
Estimado Carlos: es muy informativa tu historia sobre la sucesión del Señorío y luego Marquesado de Santa Cruz. Te hago una corrección: Doña María Luisa Paniagua de Loaysa, III Marquesa de Santa Cruz, sí tuvo sucesión en su matrimonio con su primo Don Juan José Ramírez de Arellano. Tuvieron una hija, Doña María Francisca, que no heredó por morir antes que sus padres en 1743; pero que casó con Don Gonzalo de Carvajal, teniendo por hijo a Don Diego de Carvajal. Supongo entonces que Don Diego de Carvajal ... (ver texto completo)
El Curandero del Casar de Palomero.

A los curanderos se les atribuye el don de la curación, basados en sabidurías ancestrales. Han estado siempre presentes en la vida social y religiosa de los pueblos haciendo la labor de médicos, especialmente cuando la medicina no estaba desarrollada.

El más popular de toda la provincia de Cáceres, fue “Don Tomas”, que por los años 30/50, fue famoso curandero de El Casar de Palomero, cuyo recuerdo vive todavía en la memoria de las personas mayores, tanto ... (ver texto completo)
Hola que tar estamos aquejados yo de cancer operado y ella osteoporosis
Hay fotos de besar y hay fotos para otros gustos. Esta es una foto que es documento, que es sentimiento, que es amor, unidad, union y que es un capitulo de la vida sentimental de una persona que con este sentimiento se integra en una familia para siempre, con vínculo irropible. ´las cuatro mujeres, les han echado el rasero físicamente. igual estatura, de al tura, aparecen en actitud serena, mirando a la cámara con las manos envueltas en sí mismas, y vestidos tradicionales, obscuros, que es el d ela ... (ver texto completo)