Esa noche cenaban todos los invitados en casa de la novia.
El día siguiente de la boda tenía también sus ritos. Era la tornaboda. Por la mañana se iba a dar los días a los recién casados. Los educados visitantes eran obsequiados de nuevo con aguardiente y dulces. También existía la costumbre, esa misma mañana, de que los padrinos se llegasen a la casa de los vecinos a ofrecer esos mismos presentes. Ese día los invitados del novio iban a comer la casa de éste y los de la novia a la de ella.
El día siguiente de la boda tenía también sus ritos. Era la tornaboda. Por la mañana se iba a dar los días a los recién casados. Los educados visitantes eran obsequiados de nuevo con aguardiente y dulces. También existía la costumbre, esa misma mañana, de que los padrinos se llegasen a la casa de los vecinos a ofrecer esos mismos presentes. Ese día los invitados del novio iban a comer la casa de éste y los de la novia a la de ella.