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BOADILLA DEL MONTE: Palacio del Infante Don Luis El por qué y cómo el...

Palacio del Infante Don Luis

El por qué y cómo el Infante de. Luis se hizo con la finca situada en Boadilla y con el título de Conde de Chinchón no están muy claros, aunque si parece claro que no los adquirió directamente.

Una versión dice que los términos de Villaviciosa de Odón y Boadilla del Monte, pertenecientes al Condado de Chinchón, fueron adquiridos a principios del siglo XVII por la reina Isabel de Farnesio para su hijo de. Felipe, antes de su instalación en los Ducados de Parma, Plasencia y Guastalla, al décimo Conde de Chinchón, de. Esforzia Fernández de Cabrera y Boadilla.

Posteriormente, en la última época de la vida de de. Felipe lo compró el Infante de. Luis de Borbón, su hermano. Otra establece la compra del Infante de. Felipe en 1738, a través de un intermediario, a los herederos de la casa de Cabrera-Boadilla, vendiendo el Condado a su hermano de. Luis Antonio en 1761.

Una tercera versión establece que el dia 20 de febrero de 1761 se produjo un hecho trascendental para Boadilla del Monte: la compra que realiza el rey Carlos III, por deseo de su hermano el Infante de. Luis, de la finca que tiene en propiedad la hija de los Marqueses de Mirabel, Doña Josefa, quien en ese momento ostentaba el Mayorazgo de Boadilla, por la cantidad aproximada de 1225 reales y 13 maravedís.

Posteriormente, la propiedad pasa de manos del Rey al Infante, quien en 1763 encarga al arquitecto de. Ventura Rodríguez Tizón la construcción de un palacio. Aparentemente, dirigió la construcción personalmente hasta abril de 1764.

Varios autores establecen la hipótesis de que Ventura Rodríguez operó sobre una edificación existente, pues cuando él llegó a Boadilla, el rey Carlos III y su hermano ya usaban esas tierras durante sus frecuentes cacerías.

Fue, de hecho el matrimonio del Infante con Doña María Teresa de Vallabriga lo que le forzaría a abandonar Boadilla, pues uno de los requisitos de Carlos III para su aprobación fue la imposibilidad de vivir a menos de tres leguas de Madrid, requisito que no cumplía Boadilla. Aún así, el Infante pudo usar el palacio cuando era recibido por la Corte.

Pese a todo, el palacio cayó en desuso hasta que Doña María Teresa de Borbón y Vallabriga, una vez recuperado su rango y casada con Don Manuel de Godoy, volvió a darle vida.

Durante la Guerra Civil Española (1936-39), tiempo durante el cual sirvió de hospital de sangre y cuartel militar, el palacio sufrió numerosos daños, siendo afectado por las bombas mientras estuvo activo el frente de Brunete.

El 20 de julio de 1974, por el decreto 2384 (BOE del 26 de agosto de 1974), el conjunto sería declarado Monumento Nacional.

Convento de la Encarnación

Se trata de un conjunto de convento e iglesia situado junto a la calle Mártires, dando su frente a la plaza de la Vigen del Rosario.

Don Juan González de Azqueta-Caballero y Doña María de Vera Gasca y Barco, por escritura hecha el 21 de Septiembre de 1670, otorgada ante Andrés de Catalañazor, escribano de Madrid, fundan un convento en el cual albergan a 21 Carmelitas Descalzas, bajo el título de la Encarnación del Hijo de Dios.

La reconstrucción data de 1674. La iglesia es de ladrillo con una gran sencillez de lineas. Sobre la puerta de entrada preside una hornacina con una representación de la Encarnación. La planta, de cruz latina con coro alto y capillas laterales, sigue el esquema de la iglesia de la Encarnación de Madrid.

En el interior se guardan algunos lienzos de valor: el de la anunciación, del altar mayor y el de Sansón en el tabernáculo, ambos de Francisco Solís; el de "la visitación" y el de "San Babilés y San Lorenzo" son copias de Juan Fernade.

Las armas de la fundadora y de su esposo están en el frontospicio del convento, así como los ángulos de la media naranja de la cúpula de la iglesia. En estos momentos la iglesia es objeto de remodelación.

Iglesia de San Cristobal

Se ignora con exactitud el tiempo de su fundación, si bien es cierto que el documento más antiguo, fechado a principios del siglo XV, hace referencia ya a una antigua edificación, probable precedente del actual templo.

Se trata de una antigua iglesia, con reminiscencias mudéjares, que según la tradición fue también fortaleza árabe. A lo largo de los años ha sufrido numerosas transformaciones, la última llevada a cabo por la Dirección General de Regiones Devastadas tras la Guerra Civil.

El campanario es de ladrillo, al igual que los muros que también presentan cajas de mampostería. Consta de tres naves separadas por pilares con arcos de medio punto. La nave central aparece recubierta con madera. Las naves laterales presentan bóvedas de cañón apuntado. El abside parece aprovechado de la modificada torre de un castillo. Sacristía con cielo raso y coro a los pies en alto. La portada, con arco de medio punto, se halla bajo un pórtico sostenido por dos pilares de madera. Hay varios retablos que contienen imágenes modernas.

Fuente de Ventura Rodríguez

Fuente de Ventura Rodríguez

Fuente del siglo XVIII situada en las inmediaciones del Palacio del Infante Don Luis y atribuida a Ventura Rodríguez, el también arquitecto del palacio. Se sabe que la fuente servía de depósito del palacio y que conectaba directamente con su cocina.

Con estructura de planta cuadrada, la fuente de Ventura Rodríguez cuenta con tres cuerpos centrales y dos laterales. Los cuerpos principales han sido realizados en granito quedando los otros dos en ladrillo. Destaca en esta composición los mascarones de inspiración barroca y las tres hornacinas ornamentadas con conchas, con la central de mayor tamaño. En la parte posterior de la fuente aparece un aljibe.