Trasera de la iglesia, VALDEOLMILLOS

En este rincon de la parte trasera de la iglesia, he jugado cuando era paqueña con mis amigas, nos resguardabamos del viento y recogiamos las flores de color morado de las malvas que crecen en el atrio, es una maravilla subirse a la piedra y admirar los tonos del campo que se aprecian dependiendo de la estación del año en que encuentres.