Desde el pasado día 25 tengo una indignación que no puedo con ella, un informe medico me pide realizar varias pruebas que comienzan el próximo día 9 de junio terminando el 23 Los resultados los tendré el 26 de Julio y no se me permite viajar a Herrera como tenia previsto. Pensé mucho en no hacer caso, es una oportunidad única que no podía perder por culpa de mi dificultad para caminar. Consultado con un medico me dice que es una locura, mis huesos son lo que se dice "DE CRISTAL" y este viaje con dos transbordos me podria costar un disgusto de consecuencias irreparables. Me aconseja esperar resultados y ver la realidad de perdida de masa ósea, sera cuando sepa si puedo y como puedo viajar.
Entenderéis que después de tantos años que salí y solo regrese casi de incógnito en mis viajes entrando o saliendo siempre por La Puerta y Plaza Mayor se me ofreció esta oportunidad única que para mi desgracia tengo que rechazar. Lo siento pero no perdono, en cuanto pueda y en la forma que sea estaré en mi/vuestra Herrera unos dias. Avisare con tiempo, este viaje no sera como otros, deseo vivir unos días entre vosotros, mis gentes.
Entenderéis que después de tantos años que salí y solo regrese casi de incógnito en mis viajes entrando o saliendo siempre por La Puerta y Plaza Mayor se me ofreció esta oportunidad única que para mi desgracia tengo que rechazar. Lo siento pero no perdono, en cuanto pueda y en la forma que sea estaré en mi/vuestra Herrera unos dias. Avisare con tiempo, este viaje no sera como otros, deseo vivir unos días entre vosotros, mis gentes.
Fernando, comprendo tu malestar al no poder acercarte a disfrutar ese día entre muchos de los amigos herrerenses, entre los que a partir de ahora aunque nunca nos hayamos saludados, con tu permiso te puedo contar, pero amigo Fernando, primero eres tú y por supuesto tu salud, Dios lo quiera que haya muchas más y estoy seguro que en alguna vamos a coincidir. Yo había pensado y comentado con algún forero, el gran esfuerzo que ibas hacer, pues el viaje corto no es, pero tu cariño a Herrera es superior que el esfuerzo que ibas a realizar.
Deseando todo te salga lo mejor de lo mejor y esperando otra ocasión recibe un abrazo de amistad, aunque estemos de punta a punta de esta nuestra querida patria.
Deseando todo te salga lo mejor de lo mejor y esperando otra ocasión recibe un abrazo de amistad, aunque estemos de punta a punta de esta nuestra querida patria.
Querido Fernando: no sufras más de lo que toca. Como te dicen otros foreros, llegará nueva ocasión, ya verás, y por mi parte te digo que mientras tanto sigue prolongando el disfrute del reencuentro con Herrera a través de este foro. ¿Te has fijado en la foto tan preciosa de la plaza, que Ángel ha rememorado hoy? Es una foto llena de luz y color, que da mucha serenidad y paz.
Un abrazo.
Un abrazo.
Hola María Jesús, yo mismo entiendo que tendremos mas ocasiones, que el mundo no termina aquí pero esta era una oportunidad única, un dia en que sois muchos los que estaréis juntos y yo quería veros a todos, son muchos años que falto de mi querida Herrera y puedo decir que no conozco a nadie. Al ver como escapa esta oportunidad y se acerca el dia, mi enfado aumenta, se que no tardare mucho en pisar nuevamente esa tierra pero esta oportunidad sera muy dificil que se repita.
Sobre la foto que comenta Ángel, preciosa, ya esta en la pantalla de mi ordenador, derrocha de todo, luz, enfoque, color y detalles en cantidad. Creo que tengo localizado el sitio pero me surgen dudas y eso me da mas rabia, no conocer lugares y rincones donde pase una gran parte de mi infancia.
Confío poder estar entre vosotros unos días y si es alguna festividad, mejor. Fuerte abrazo
Sobre la foto que comenta Ángel, preciosa, ya esta en la pantalla de mi ordenador, derrocha de todo, luz, enfoque, color y detalles en cantidad. Creo que tengo localizado el sitio pero me surgen dudas y eso me da mas rabia, no conocer lugares y rincones donde pase una gran parte de mi infancia.
Confío poder estar entre vosotros unos días y si es alguna festividad, mejor. Fuerte abrazo
Fernando, creo que te entiendo y comprendo; no obstante, es mejor pensar que nunca sabemos cual es la mejor oportunidad; me encantaría que pronto lo puedas comprobar. Cuando a veces lloramos por lo que parece que perdemos, luego las lágrimas se convierten en gran alegría; seguro que has tenido esta experiencia más de una vez, ¿es así?
Un abrazo, Mª Jesús
Un abrazo, Mª Jesús
Tienes toda la razón María Jesús, merece la pena pensar en ello y saber esperar. Te lo agradezco, fuerte abrazo
Querido Fernando. ¿Cómo va tu salud? hace días que no veo algún mensaje tuyo. Habrás leído que te recordamos en el encuentro del 18 de junio, como a todos los demás que no pudisteis asistir.
El pasado miércoles estuvimos en Herrera Carmina Bruyel y yo; a pesar del calor, nos fuimos andando desde la estación hasta la Plaza Mayor, recordando los tiempos de ir y venir con las bicis, contemplamos el Pisuerga y los preciosos patos desde el Puente de San Francisco, nos detuvimos a descansar a la sombra en uno de los bancos que hay cerca de la casa de la Sra. Candela; hablamos de los linares, etc... En la plaza compramos cerezas del Bierzo (Carmina quiso visitar Herrera en día de mercado) y como niñas pequeñas las lavamos en los caños del pilón y poco a poco las terminamos sentadas en una terraza, acompañadas de unas aceitunas, cerveza y mosto; nos supieron a gloria, como las manzanas "prohibidas" que alguna vez cogimos en huerta ajena, o las chocolatinas nestlé para hacer el álbum de cromos que pocos completaban.
Hicimos una especial parada en las CUATRO ESQUINAS, te recordamos y nos quedamos con las ganas de subir las escaleras de la casa que habitaste: esperaremos a poder subirlas contigo. En la comida pedimos el plato del día y nos acordamos de los cangrejos sólo a la hora del postre, cuando llevaron a la mesa vecina dos buenos platos de cangrejos. Se cumplió el dicho "los verás, pero no los catarás"; será cosa de la edad: el despiste. La verdad es que teníamos más ganas de hablar que de comer.
El parque estaba precioso, con la frescura de la sombra de los castaños: los pájaros cantando... disfrutamos mucho y nos emocionamos en la ermita y el cementerio; por cierto, fue precioso el canto de un pajarillo en la capilla, con su revoloteo entre una viga y el nido. Después, sentadas a la sombra en un banco junto a la ermita, recordamos la iglesia visigoda que hubo en esa zona y justo al día siguiente la prensa se hizo eco de los últimos hallazgos visigodos en las excavaciones recientes.
Disfrutamos también en la conversación con el conductor del taxi que nos acercó a la estación; daba gusto escucharle lo bien que hablaba de Herrera y elogiaba la buena situación geográfica de Herrera. Al subir al tren recordamos con optimismo la frase: "si no se van, no vuelven"; así que ¡nos fuimos y quedamos con la esperanza de volver!
Un fuerte abrazo, Fernando.
El pasado miércoles estuvimos en Herrera Carmina Bruyel y yo; a pesar del calor, nos fuimos andando desde la estación hasta la Plaza Mayor, recordando los tiempos de ir y venir con las bicis, contemplamos el Pisuerga y los preciosos patos desde el Puente de San Francisco, nos detuvimos a descansar a la sombra en uno de los bancos que hay cerca de la casa de la Sra. Candela; hablamos de los linares, etc... En la plaza compramos cerezas del Bierzo (Carmina quiso visitar Herrera en día de mercado) y como niñas pequeñas las lavamos en los caños del pilón y poco a poco las terminamos sentadas en una terraza, acompañadas de unas aceitunas, cerveza y mosto; nos supieron a gloria, como las manzanas "prohibidas" que alguna vez cogimos en huerta ajena, o las chocolatinas nestlé para hacer el álbum de cromos que pocos completaban.
Hicimos una especial parada en las CUATRO ESQUINAS, te recordamos y nos quedamos con las ganas de subir las escaleras de la casa que habitaste: esperaremos a poder subirlas contigo. En la comida pedimos el plato del día y nos acordamos de los cangrejos sólo a la hora del postre, cuando llevaron a la mesa vecina dos buenos platos de cangrejos. Se cumplió el dicho "los verás, pero no los catarás"; será cosa de la edad: el despiste. La verdad es que teníamos más ganas de hablar que de comer.
El parque estaba precioso, con la frescura de la sombra de los castaños: los pájaros cantando... disfrutamos mucho y nos emocionamos en la ermita y el cementerio; por cierto, fue precioso el canto de un pajarillo en la capilla, con su revoloteo entre una viga y el nido. Después, sentadas a la sombra en un banco junto a la ermita, recordamos la iglesia visigoda que hubo en esa zona y justo al día siguiente la prensa se hizo eco de los últimos hallazgos visigodos en las excavaciones recientes.
Disfrutamos también en la conversación con el conductor del taxi que nos acercó a la estación; daba gusto escucharle lo bien que hablaba de Herrera y elogiaba la buena situación geográfica de Herrera. Al subir al tren recordamos con optimismo la frase: "si no se van, no vuelven"; así que ¡nos fuimos y quedamos con la esperanza de volver!
Un fuerte abrazo, Fernando.
