No me fueron mal los estudios, todo lo contrario aunque parezca presuntuoso.
Sólo una chica y yo continuamos estudiando, yo gracias a una beca de Universidades Laborales.
Terminé una carrera media que no viene a cuento de que especialidad.
Mis quejas hacia esa persona son que enseñaba atemorizando.
¿Quién no se acuerda de aquellos corros, correa en mano, contando de 2 en 2, de 3 en 3... Al final cobrábamos todos, lo que podía ser un juego de cálculo mental se convertía en una rueda brutal. Todavía recuerdo aquella cara de crueldad. Cuando estaba cabreado por algo, rueda al canto. A lo mejor le gritaban en casa y lo pagábamos nosotros.
¿Quién no recuerda esas correcciones de dictados el las que por, orden de fila, íbamos corrigiendo palabra por palabra diciendo si era nombre, adjetivo, verbo... y la ortografía de la misma?. El se ponía al lado y cada duda o equivocación palo o correa. así hasta que acertaba. Muchos terminaban la descripción de la palabra llorando y no de rabia.
A mi en un ataque de ira me dio con la vara cerca de la sien y tubo que intervenir mi padre porque llegué con el ojo morado a casa.
Yo no digo que no enseñara bien, que sus sistemas no fueran buenos, pero el método era terrible.
Yo lo tuve con 11 años, a esa edad si te quejabas de maltrato te daban más. Teníamos 11 años y según el día teníamos miedo.
Del comentario " ¿quién no pegaba a los niños?" me parece que está fuera de lugar, NO HAY JUSTIFICACIÓN y tú parece que lo asumes. Pasó pero era una barbaridad y por eso lo denuncio.
Yo no puedo respetar a quien no tuvo ningún respeto a un grupo de niños, repito de 11 años, que no podíamos ni preguntar ¿por qué?.
Doy por terminado el tema. No quiero volver a recordarlo.
Sólo una chica y yo continuamos estudiando, yo gracias a una beca de Universidades Laborales.
Terminé una carrera media que no viene a cuento de que especialidad.
Mis quejas hacia esa persona son que enseñaba atemorizando.
¿Quién no se acuerda de aquellos corros, correa en mano, contando de 2 en 2, de 3 en 3... Al final cobrábamos todos, lo que podía ser un juego de cálculo mental se convertía en una rueda brutal. Todavía recuerdo aquella cara de crueldad. Cuando estaba cabreado por algo, rueda al canto. A lo mejor le gritaban en casa y lo pagábamos nosotros.
¿Quién no recuerda esas correcciones de dictados el las que por, orden de fila, íbamos corrigiendo palabra por palabra diciendo si era nombre, adjetivo, verbo... y la ortografía de la misma?. El se ponía al lado y cada duda o equivocación palo o correa. así hasta que acertaba. Muchos terminaban la descripción de la palabra llorando y no de rabia.
A mi en un ataque de ira me dio con la vara cerca de la sien y tubo que intervenir mi padre porque llegué con el ojo morado a casa.
Yo no digo que no enseñara bien, que sus sistemas no fueran buenos, pero el método era terrible.
Yo lo tuve con 11 años, a esa edad si te quejabas de maltrato te daban más. Teníamos 11 años y según el día teníamos miedo.
Del comentario " ¿quién no pegaba a los niños?" me parece que está fuera de lugar, NO HAY JUSTIFICACIÓN y tú parece que lo asumes. Pasó pero era una barbaridad y por eso lo denuncio.
Yo no puedo respetar a quien no tuvo ningún respeto a un grupo de niños, repito de 11 años, que no podíamos ni preguntar ¿por qué?.
Doy por terminado el tema. No quiero volver a recordarlo.
Yo no conozco ni conocí al susodicho maestro. Pero sí conocí y sufrí, a otro profesor de la misma "escuela", que también impartió clase en Herrera durante años, en este caso, en el colegio de los italianos.
Se trata de D. José María, profesor y director bancario, concretamente impartía las asignaturas de ciencias si mal no recuerdo (matemáticas y ciencias naturales). Curiosamente no se ha hablado de él, seguramente, porque no hay foreros que fueran alumnos suyos (quizás chenando), pero un "experto" en romper varas en las manos de los alumnos, con rondas hasta de 23 golpes.
El protocolo era el siguiente, mandaba a alguien al patio, a por un palo de un árbol, robusto y que no se rompiera, sino era así, lo iba a pagar el encargado de traerlo.
Nos preguntaba la lección oral todos los días, o teníamos que resolver problemas en la pizarra, y el que no se lo supiera ronda de palos, que iba incrementándose progresivamente. Yo lo sufrí, la verdad es que poco, porque por suerte o por desgracia (más bien por acojone) me sabía casi siempre la lección. Pero recuerdo compañeros (incluso con alguna minusvalía), que recibían incluso en el miembro afectado.
La verdad no guardo rencor, pero si lo recuerdo perfectamente, muy nítidamente, aunque hayan transcurrido más de 40 años.
Como anécdota, de su doble faceta, señalar que los miércoles, eran buenísimos, ya que como había mercado, y sus obligaciones bancarias, le hacían retrasarse, la primera hora de la tarde de matemáticas nos la saltábamos, con gran regocijo para todos nosotros.
No se trata de despertar viejos "fantasmas", y esto sucedía en Herrera, hace 40 años, y por eso lo cuento.
Y le doy la razón a Félix, podía ser un miembro honorable, y respetado de la sociedad herrerense, pero eso no quita que sus métodos eran muy que muy repochables, con independencia de que esto sucediera en los años 70.
Y la antítesis, era otro profesor, que si guardo gran cariño, y era Don Jerónimo.
Se trata de D. José María, profesor y director bancario, concretamente impartía las asignaturas de ciencias si mal no recuerdo (matemáticas y ciencias naturales). Curiosamente no se ha hablado de él, seguramente, porque no hay foreros que fueran alumnos suyos (quizás chenando), pero un "experto" en romper varas en las manos de los alumnos, con rondas hasta de 23 golpes.
El protocolo era el siguiente, mandaba a alguien al patio, a por un palo de un árbol, robusto y que no se rompiera, sino era así, lo iba a pagar el encargado de traerlo.
Nos preguntaba la lección oral todos los días, o teníamos que resolver problemas en la pizarra, y el que no se lo supiera ronda de palos, que iba incrementándose progresivamente. Yo lo sufrí, la verdad es que poco, porque por suerte o por desgracia (más bien por acojone) me sabía casi siempre la lección. Pero recuerdo compañeros (incluso con alguna minusvalía), que recibían incluso en el miembro afectado.
La verdad no guardo rencor, pero si lo recuerdo perfectamente, muy nítidamente, aunque hayan transcurrido más de 40 años.
Como anécdota, de su doble faceta, señalar que los miércoles, eran buenísimos, ya que como había mercado, y sus obligaciones bancarias, le hacían retrasarse, la primera hora de la tarde de matemáticas nos la saltábamos, con gran regocijo para todos nosotros.
No se trata de despertar viejos "fantasmas", y esto sucedía en Herrera, hace 40 años, y por eso lo cuento.
Y le doy la razón a Félix, podía ser un miembro honorable, y respetado de la sociedad herrerense, pero eso no quita que sus métodos eran muy que muy repochables, con independencia de que esto sucediera en los años 70.
Y la antítesis, era otro profesor, que si guardo gran cariño, y era Don Jerónimo.
Este Sr. parece que era "multiusos". También fue concejal, creo que de fiestas o de juventud y digo creo porque fuimos a protestar al Ayuntamiento que en fiestas no programaban casi nada para los jóvenes y nos atendió él.
Nos dijo que la juventud no colaboraba en nada y nosotros le dijimos que nunca había hablado con nosotros para nada. Convocamos una reunión de gente joven en el Ayuntamiento, quedamos en fecha y hora. El día de la reunión llenamos el salón del Ayuntamiento y tuvimos que ir a buscarle a casa, no se lo creía. Nos dio buenas palabras para colaborar y escuchar propuestas en la próxima programación y bla, bla, bla.....
Lo único que demostramos es que estábamos dispuestos a colaborar.
Todo siguió igual, al año siguiente "copia y paga", cambio de fechas, otros toreros y orquestas nuevas en la plaza. Menos mal que nos hacía falta poco para divertirnos.
Nos dijo que la juventud no colaboraba en nada y nosotros le dijimos que nunca había hablado con nosotros para nada. Convocamos una reunión de gente joven en el Ayuntamiento, quedamos en fecha y hora. El día de la reunión llenamos el salón del Ayuntamiento y tuvimos que ir a buscarle a casa, no se lo creía. Nos dio buenas palabras para colaborar y escuchar propuestas en la próxima programación y bla, bla, bla.....
Lo único que demostramos es que estábamos dispuestos a colaborar.
Todo siguió igual, al año siguiente "copia y paga", cambio de fechas, otros toreros y orquestas nuevas en la plaza. Menos mal que nos hacía falta poco para divertirnos.
