Hay un tipo de
arquitectura que se conoce como regionalista. Dentro de ésta, el estilo montañés se puso de moda en
Asturias desde comienzos del siglo XX hasta bien entrada la década de los 30.
Existen muchos ejemplos tanto en la zona urbana como en la zona rural.
Su aspecto recuerda las grandes casonas de
Cantabria con sus
torres de
tejados a cuatro
aguas y sus voladizos. Aunque constituye en sí mismo una forma de arquitectura, en la edificación urbana se reduce al uso de algunos de sus elementos combinados a veces con otros tradicionales asturianos o de cualquier otro estilo.
Es fácil distinguir estos
edificios porque la parte más sobresaliente es el extremo rematado con una
torre, generalmente muy decorativa.