El Morche, o sea, Torrox, es un pueblo que ha vivido hasta ahora fundamentalmente de la agricultura, y desde hace 30 años a esta parte, también del comercio y de la hostelería. De modo que todos los habitantes de este hermoso pueblo y de sus barrios, como El Morche, tenemos los mismos derechos a vivir y trabajar como bien podamos, incluidos los nuevos habitantes que han decidido adquirir libremente una segunda vivienda en este municipio, pero desde luego, los tenemos los que ya llevamos aquí de toda la vida. Todos debemos hacer un ejercicio de tolerancia y civismo, de modo que hay que elegir bien los lugares de nuestras viviendas, ya que parece que algunos, quizás, no hayan pensado bien que las han adquirido en la misma desembocadura del barranco de Güy o junto a un sembrado de tomates. Los veraneantes no son nadie para decirle a un agricultor lo que deben sembrar en su arriesgada y dura profesión. La agricultura es sector primario de la economía, de la cual comemos en nuestras casas o en los restaurantes turísticos, por cierto, sector servicios o terciario de la economía. Las quejas al futuro alcalde, que es quien da permisos para construir a quien no debe al lado del agua del mar o junto al mencionado arroyo. Quéjese usted la especulación también que es más grave y asuma los futuros riesgos de haber comprado una casa donde no debe. Un saludo.
