Ya ha pasado la Romería, y ha sido estupenda, el tiempo casi que nos da el disgusto de no poder salir con nuestra Madre, pero, al final, y como hace siempre, se hizo el milagro, y justo cuando iba la Virgen saliendo de la Iglesia, empezó a clarear, y al ir por el cruce de Cortelazor, ya estaba todo el cielo despejado. Comenzó a llover justo cuando ya estaba la Virgen dentro de la Iglesia, después de tocar ese estupendo silencio que sólo hacen los de la Banda de música del Cerro, bravo por ellos. Y bravo por tan buena organización de Romería, a quien la haya organizado que no lo sé, pero no ha habido ningún contratiempo, ni ningún problema con nadie. Bravo también por todos aquellos marineros, que a pesar del cansancio, traen a nuestra Virgen a hombros. Gracias marineros por tan estupenda Romería.
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