Los nómades subsisten gracias a los productos de sus manadas, y siguen a sus necesidades. El nómade puede realizar trueques por aquellas cosas que necesita, como metal, pero no depende de la civilización para saquearla, como los bárbaros. La cultura del nómade no debe confundirse con la de los bárbaros. ‘Cultura’ no debería connotar ‘civilización’: existen culturas humanas muy ricas y profundas sin civilización.
Una famosa cita del antropólogo Claude Lévi-Strauss dice: ‘El bárbaro es aquel que cree en la barbarie’, significado semejante al de su metáfora en ‘Raza e historia’, en el que afirma que dos culturas son como dos trenes distintos que se cruzan: cada una cree que ha elegido la dirección correcta. Un análisis más amplio revela que ningún grupo ‘elige’ su dirección, sino que sus comportamientos ‘brutales’ se formaron a partir de la necesidad, estando completamente subordinados a la geografía que los circunda y a las circunstancias de su nacimiento.
Una famosa cita del antropólogo Claude Lévi-Strauss dice: ‘El bárbaro es aquel que cree en la barbarie’, significado semejante al de su metáfora en ‘Raza e historia’, en el que afirma que dos culturas son como dos trenes distintos que se cruzan: cada una cree que ha elegido la dirección correcta. Un análisis más amplio revela que ningún grupo ‘elige’ su dirección, sino que sus comportamientos ‘brutales’ se formaron a partir de la necesidad, estando completamente subordinados a la geografía que los circunda y a las circunstancias de su nacimiento.
