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Mensajes de PETRES (Valencia) enviados por Victoria Serna,:

El secreto de la sabiduría, del poder y del conocimiento es la humildad (Ernest Hemingway)
Donde hay mucho sentimiento, hay mucho dolor (Leonardo da Vinci)
Quien vive sin pensar, no puede decir que vive (Pedro Calderón de la Barca)
El secreto de la sabiduría, del poder y del conocimiento es la humildad (Ernest Hemingway)
De lo que tengo miedo es de tu miedo (William Shakespeare)
Quien vive sin pensar, no puede decir que vive (Pedro Calderón de la Barca)
El exito y el fracaso son dos impostores (Jorge Luis Borges)
De lo que tengo miedo es de tu miedo (William Shakespeare)
¿Televisión? Nada bueno puede venir de una palabra medio griega y medio latina (C. P. Scott)
El exito y el fracaso son dos impostores (Jorge Luis Borges)
El hombre todavía puede apagar el ordenador; sin embargo, tendremos que esforzarnos mucho para conservar este privilegio (J. Weizembaum)
¿Televisión? Nada bueno puede venir de una palabra medio griega y medio latina (C. P. Scott)
El hombre todavía puede apagar el ordenador; sin embargo, tendremos que esforzarnos mucho para conservar este privilegio (J. Weizembaum)
El sabio comienza por hacer lo que quiere enseñar y despues enseña (Confucio)
Hazles comprender que no tienen en el mundo otro deber que la alegria (Paul Claudel)
Vicente Gerbasi

BOSQUE DE MÚSICA

Mi ser fluye en tu música,
bosque dormido en el tiempo,
rendido a la nostalgia de los lagos del cielo.
¿cómo olvidar que soy oculta melodía
y tu adusta penumbra voz de los misterios?
He interrogado los aires que besan la sombra, ... (ver texto completo)
... porque su vida fueron las palabras.
G. Suárez

Para qué las palabras
Si no consiguen darte la alegría
ni llenan el vacío.

Imagínate
un mundo sin palabras.
... (ver texto completo)
Caminamos a solas por el mundo.
Caminamos a solas.

Quisimos encontrar el porqué de las cosas.

Si somos algo, somos
Una generación cuyo destino
Es recorrer las calles en silencio.

Mil calles que no van a parte alguna.
II

Que se acaben los sueños.
La juventud con ellos se termina.
Buenos tiempos, aquéllos,
Con gente que te quiso y que querías...
Ha llegado la hora de cruzar la frontera.

De atravesar un puente.
... (ver texto completo)
... porque su vida fueron las palabras.
G. Suárez

Para qué las palabras
Si no consiguen darte la alegría
ni llenan el vacío.

Imagínate
un mundo sin palabras.

Días que han terminado para siempre,
Caminos que se pierden en la noche...

Con la verdad te encuentras,
Después de tantos años de ceguera
Detrás de unas palabras. ... (ver texto completo)
Vicente García

En medio del camino

I

Ahora
Comienzas a vivir de otra manera.

Días que terminaron para siempre, ... (ver texto completo)
II

Que se acaben los sueños.
La juventud con ellos se termina.
Buenos tiempos, aquéllos,
Con gente que te quiso y que querías...
Ha llegado la hora de cruzar la frontera.

De atravesar un puente.
... (ver texto completo)
Vicente García

En medio del camino

I

Ahora
Comienzas a vivir de otra manera.

Días que terminaron para siempre, ... (ver texto completo)
Vicente García

Quiero escribir los versos más alegres

Quiero escribir los versos más alegres.
Quiero escribir que ella está conmigo
Y relucen los astros a lo lejos.

Quiero escribir los versos más alegres.
Quiero escribir palabras de esperanza.
Nada de versos tristes esta noche.

Sé del dolor que azota el tercer mundo
Y también el segundo, y el primero.
Sé que ha pasado cerca de mi casa

Y que la noche llega y es preciso
Recuperar el ánimo. Por eso
Quiero escribir los versos más alegres ... (ver texto completo)
Buenos dias amig@s
Feliz viernes y un bonito finde, por aqui sequimos con un buen dia sol, y buena temperatura.
Un besoooooooooooooooooo

Jordi Doce

Después de la tormenta

Cuelgan las nubes sobre el día
como una sucia piel curtida ... (ver texto completo)
Lluvia al alma
octubre 21, 2011 | Autor Michael Priego Manicke
Se desmorona la tristeza,
como agua de lluvia,
socavones de recuerdos
en un pecho engullido.
Tiempo muerto, vacío inmerso,
amor por doquier y un verso
clavado en mi corazón, que intenta
crear poesía en donde no queda color ... (ver texto completo)
El hombre que un dia creyó en el amor
abril 20, 2012 | Autor Michael Priego Manicke
Hace mucho tiempo que no me desvelaba, y hace mucho tiempo que tampoco escribía, y bastante tiempo que tampoco me enamoraba. Cuando las cosas pasan, al parecer no vienen solas, es bueno darse cuanta de lo vulnerables que somos las personas bajo ciertos efectos volátiles de esta vida, recuerdo aquellos días cuando uno goza del control de su universo de una manera autoritaria y egoísta, aunque la verdad, no extraño todo aquello, en esta vida muchas veces somos marionetas de un sistema, de un trabajo o simplemente de nuestro corazón, es extraño, y dulcemente embriagador ser un ente dependiente de los sentimientos y subdividir el mundo de los sueños con otra persona, es intensamente interesante el planificar una vida dependiendo de aquella persona que a cautivado nuestros cinco sentidos, el proyectarse mas allá de la barrera que delimitaba nuestra alicaída y monótona vida pasada.
Hay un mundo por delante, una inexplorada ladera que tiene mucho que darnos a conocer, hay dos universos paralelos que compartirán una sola órbita, un proceso y un largo aprendizaje de nuevas estructuras que irán definiendo el futuro.
Tengo tantas preguntas que quisiera saber su respuesta, pero no es tan fácil, su dosificación ira día a día y la endereza de la vida, la experiencia y la actitud lograran la solvencia necesaria para luchar y mantener por lo cual alguna ves desde muy pequeño soñé, en recopilar todo aquello que siempre quise en un mundo en donde un ser extremadamente especial llene cada rincón de mis sueños con su magia y en donde la vida me dote de tener en los brazos el fruto del amor.
Desde que te conocí mi andar ya no es el mismo, porque con cada paso que doy, te veo por doquier, ya no sueño de la misma forma, porque en cada sueño apareces una y otra vez, cuando me veo al espejo, no solo me veo a mi mismo, sino que veo el reflejo de tu imagen incrustada en mis pupilas.
Escribo para no olvidar que lucharé por todo esto que siento, porque si alguna vez el destino quisiera desquitarse conmigo y alejarte de mi, no será porque yo dejé que todo esto se desvaneciera en el olvido, porque habré dado hasta el último aliento por aferrarme a este sueño y convertirlo en la más dulce realidad a tu lado.

(Escrito de hace muchos años, en donde los amaneceres tenían otro color, y las tormentas el color de tu ira.)

Registro de propiedad intelectual N° 216386 DDI ® ... (ver texto completo)
« Si yo fuera tu vestidoLa moral de cristal
enero 15, 2013 | Autor Michael Priego Manicke
Pataleo Cotidiano

El ser Humano siempre guiará sus convicciones de acuerdo a su propia conveniencia.
Si aplastas un pollito recién nacido, seras un infeliz, si aplastas un ratón te miraran con aprobación, una vida selectiva vale mas que la otra, como quien podría decir que matar a alguien “Feo” no es pecado, pero tocar a alguien “Lindo” podría llevar a las penas del infierno.
Si aplasto una mariposa ... (ver texto completo)
Mis Cuatro Blancas Paredes
diciembre 18, 2011 | Autor Michael Priego Manicke

Mis Cuatro Blancas Paredes

Cuatro blancas paredes que envuelven mi vida,

cuatro tiempos atrapados en una habitación,

cuatro pequeños palpitares de recuerdos,

cuatro extremidades fundidas en un condenado espacio,

cuatro gritos aislados del mundo,

cuatro silencios adormecidos en la indiferencia del universo,

pensares perdidos

en estas cuatro paredes,

cuatro colores fundidos en el pasado,

cuatro luces que arrastran a la incertidumbre,

cuatro batallones de dolor,

cuatro derrotas diarias…son así,

cada cuatro días me consumo la vida en mis cuatro blancas paredes,

cada cuatro mañanas sigo viviendo en mis cuatro blancas paredes,

cada cuatro minutos veo cómo cuatro lágrimas mueren en frente de mis cuatro blancas paredes,

cada cuatro horas mi melancolía se impregna en mis

cuatro blancas paredes…

¿Cómo no las voy a amar?

si han sido mi único

mundo en estos cuatro tiempos.

La única luz de vida en

este camino, me la

han dado mis cuatro

blancas paredes… ... (ver texto completo)
La politica es a veces como la gramatica: un error en el que todos incurren y que finalmente es reconocido como regla (André Maulraux)
Nunca sabremos nada...

¿Quién puso en nuestro espíritu anhelante,
vago rumor de mares en zozobra,
emoción desatada,
quimeras vanas, ilusión sin obra?
Hermano mío, en la inquietud constante,
nunca sabremos nada...

¿En qué grutas de islas misteriosas ... (ver texto completo)
Porfirio Barba Jacob

EL CORAZÓN REBOSANTE

El alma traigo ebria de aroma de rosales
y del temblor extraño que dejan los caminos...
A la luz de la luna las vacas maternales
dirigen tras mi sombra sus ojos opalinos.

Pasan con sencillez hacia la cumbre, ... (ver texto completo)
Solo se aprende a traves del fracaso, y lo que se aprende es la importancia de la prevision (Irvine Welsh)
El gusto es el enemigo de la creatividad (Pablo Picasso)
Que rico cafe
Mi cafe virtual de cada dia,
Ciencia es creer en la ignorancia de los cientificos (Richard Phillips Feynman)
Que rico cafe
José Coronel Urtecho

Si mi vida no es mía, sino tuya,
y tu vida no es tuya, sino mía,
separados morimos cada día
sin que esta larga muerte se concluya.

Hora es que el uno al otro restituya
esa vida del otro que vivía,
y tenga cada cual la que tenía
otra vez en el otro como suya.

Mira pues, vida mía, que te espero
y de esa espera vivo mientras muera
la muerte que, sin ti, contigo muero.

Ven, mi vida, a juntar vida con vida
para que vuelva a ser la vida que era
que la vida a la vida a la vida convida. ... (ver texto completo)
María Cristina Orantes

Mujer

Tendida bajo el ala de la vida,
De par en par abierta la mirada,
Bebiéndose de un sorbo la jornada
Que en el tiempo dejara suspendida.

Vuelta sombra la piel estremecida, ... (ver texto completo)
María Cristina Orantes

A un corazón inconstante

Aprendí a conocer a la inconstancia
y a alargar el instante que me daba,
fui viviendo a medida que llegaba
el tiempo en el reloj: mágica instancia.

Tiempo de arena. Tiempo detenido ... (ver texto completo)
María Cristina Orantes

Episodio

Yo comencé una historia que fue mía.
La tejí en el umbral de la mañana,
perfumé con su aroma mi ventana
y bebí de su luz al mediodía.

Así brotó en capullo la alegría ... (ver texto completo)
María Cristina Orantes

Jorge Nunes

Desde el paisaje huraño y desvelado
que acogió entre la niebla mi figura,
rescata mi memoria la más pura
imagen que guardara del amado.

Revivo silencios del pasado ... (ver texto completo)
Todo en mí avanza y se detiene
y todo por entero desciende en un relincho:
lo que no fui lo que no soy,
lo que me nubla y me desaparece, animal
que lame al animal de la doliente.

Las bodas de las flores se dan sobre el estigma.
El polen se desprende al comenzar la aurora
y en un solo momento la vida se redime
y entonces se retira.
La santa en penitencia grita
que pueda ser de fuerza su grandeza,
bailando
en este reino sin escrúpulos. Teresa
es soberana en su magnificencia y con su voz
de pájaro en su preñez avisa: 'Escribo
abierta, volando y con jacintos
de golpe me doy cuenta
que estoy viva.' Y de misterios tantos
se tiñó su lengua, su resplandor ... (ver texto completo)
María Baranda

En los pistilos

De luz te vi nacer donde la estirpe
de un sol de sangre entre las nubes
límpido alumbra la voz de las raíces.
Si entro en tu sueño me despierto,
amanecen las sombras por tu alcoba,
en tu nombre se enciende verde el mundo ... (ver texto completo)
Todo en mí avanza y se detiene
y todo por entero desciende en un relincho:
lo que no fui lo que no soy,
lo que me nubla y me desaparece, animal
que lame al animal de la doliente.

Las bodas de las flores se dan sobre el estigma.
El polen se desprende al comenzar la aurora
y en un solo momento la vida se redime
y entonces se retira.
María Baranda

En los pistilos

De luz te vi nacer donde la estirpe
de un sol de sangre entre las nubes
límpido alumbra la voz de las raíces.
Si entro en tu sueño me despierto,
amanecen las sombras por tu alcoba,
en tu nombre se enciende verde el mundo ... (ver texto completo)
bajo el rayo más fuerte de aquel sol,
luchamos, la luz a nuestro lado,
el tiempo en todas partes
y la milicia de los cielos
a la voz de la traición,
crímenes venidos de muy lejos,
vestidos con grebas de bronce
y coraza escamada,
llevaron la plaga,
a los atrios y almacenes, ... (ver texto completo)
aquí hace tiempo mirábamos un mundo,
quizá desesperado,
de leyes agotadas,
de héroes y de locos,
de vendedores y príncipes extintos,
un mundo donde el sol se aleja,
desciende el horizonte,
las piedras abren grietas
por donde pasa la muía
con su amo que se arrastra, ... (ver texto completo)
yeguas magníficas
eran cobalto
en los caminos bárbaros,
y un viejo sacristán
de pie en el muelle
decía de Dios y los insectos
a tres días de la muerte,
¡guerreros de hermosas manos
y cuerpos de árbol!, desnudos van
pero gloriosos, ... (ver texto completo)
bajo el rayo más fuerte de aquel sol,
luchamos, la luz a nuestro lado,
el tiempo en todas partes
y la milicia de los cielos
a la voz de la traición,
crímenes venidos de muy lejos,
vestidos con grebas de bronce
y coraza escamada,
llevaron la plaga,
a los atrios y almacenes, ... (ver texto completo)
mar arriba entre las nubes
se iba el canto del ejército,
y nadie,
en la visitación de los extraños,
sintió la paz que mata
mas no alcanza a disipar
los sueños ya de siempre,
blancas eran las caras consumidas,
blancas también las piedras de la fosa
que hizo cavar aquel Sargento, ... (ver texto completo)
yeguas magníficas
eran cobalto
en los caminos bárbaros,
y un viejo sacristán
de pie en el muelle
decía de Dios y los insectos
a tres días de la muerte,
¡guerreros de hermosas manos
y cuerpos de árbol!, desnudos van
pero gloriosos, ... (ver texto completo)
¡Señor, el mundo es tan ajeno!,
será, narraba aquella anciana, cuando se
guarde el sol
y de los montes bajen a un feudo de leyendas,
en paz con la mesura del enebro, lo harán
por la espiral del cielo, el corazón a punto
y la marea...

así fue el nacimiento
de todos los Espíritus, ... (ver texto completo)
mar arriba entre las nubes
se iba el canto del ejército,
y nadie,
en la visitación de los extraños,
sintió la paz que mata
mas no alcanza a disipar
los sueños ya de siempre,
blancas eran las caras consumidas,
blancas también las piedras de la fosa
que hizo cavar aquel Sargento, ... (ver texto completo)
el Padre en el abismo
que ruega por el sol y su blanca marejada,
el Padre en el principio que todo lo reclama,
el todopoderoso que guarda de noche
su ejército de dioses,
caballos de viva sangre eran su primer coro,
y la palabra pura

en el mundo
libre al aire y al mar; ... (ver texto completo)
¡Señor, el mundo es tan ajeno!,
será, narraba aquella anciana, cuando se
guarde el sol
y de los montes bajen a un feudo de leyendas,
en paz con la mesura del enebro, lo harán
por la espiral del cielo, el corazón a punto
y la marea...

así fue el nacimiento
de todos los Espíritus, ... (ver texto completo)
ángeles venidos de la Altura
cruzaban muchos círculos,
ofrendas de pimientos y frutas muy jugosas
eran puestas al paso de los templos, los ángeles
con las manos abiertas, decían el Bien decían
el Mal
hasta la hora en que una estrella
aparecía en el firmamento
y toda exclamación se disipaba,
... (ver texto completo)
el Padre en el abismo
que ruega por el sol y su blanca marejada,
el Padre en el principio que todo lo reclama,
el todopoderoso que guarda de noche
su ejército de dioses,
caballos de viva sangre eran su primer coro,
y la palabra pura

en el mundo
libre al aire y al mar; ... (ver texto completo)
María Baranda

Ángeles de proa

I

Hemos llegado
y no es del mar donde somos,
aquí hace tiempo estaba nuestra casa,
en el Oriente de los vientos; ... (ver texto completo)
ángeles venidos de la Altura
cruzaban muchos círculos,
ofrendas de pimientos y frutas muy jugosas
eran puestas al paso de los templos, los ángeles
con las manos abiertas, decían el Bien decían
el Mal
hasta la hora en que una estrella
aparecía en el firmamento
y toda exclamación se disipaba,
... (ver texto completo)
María Baranda

Ángeles de proa

I

Hemos llegado
y no es del mar donde somos,
aquí hace tiempo estaba nuestra casa,
en el Oriente de los vientos; ... (ver texto completo)
María Antonieta Le-quesne

Y todo pasará

Yo sé que hay signos que a mi vida marcan
un límite cercano...

¿La Muerte?
Pienso en ella como en la Primavera:
más ansias que cuidado... ... (ver texto completo)
María Antonieta Le-quesne

Alma que mueres de amor

Alma que mueres de amor,
dime lo que es despertar
en la alborada de Dios,
cuando se muere de amor.

Yo sé lo que es enfermar
y agonizar de pasión,
pero no he sabido amar
para morirme de amor.

Alma que mueres de amor,
dime lo que es enfermar
para morirme de amor...
¡Yo sólo sé agonizar!

Y, para hacerme morir,
sé que no habrá otro dolor:
¡en el curso del vivir
no he sentido otro mayor!

Y no me quiero morir
si no me muero de amor,
porque yo quiero vivir
la agonía del amor...

Alma que mueres de amor,
dime lo que es enfermar
para morirme de amor...
¡Yo sólo sé agonizar! ... (ver texto completo)
María Antonieta Le-quesne

Recodo azul

Hay caminitos tristes, retorcidos,
por donde vamos siempre
cabizbajos y solos...
donde hay recodos hondos como nidos,
donde hay nidos de sedas
y cabecitas de oro... ... (ver texto completo)
María Antonieta Flores

De el Señor de la muralla

J) De cómo una dama consciente
entrega sus riquezas y joyas a quien
recorre los campos de guerra
empuñando la aniquilación.

Señor de la Muralla ... (ver texto completo)
O) Se cuenta cómo después de bodas
y celebraciones, la cumplida esposa,
nunca olvidada por el Señor, da el
paso de rigor.

Aguardo
lúcida
el amanecer
Si uno cree en cada palabra
Si se ansió y gozó la tenue caricia de un tirano ... (ver texto completo)
María Antonieta Flores

De el Señor de la muralla

J) De cómo una dama consciente
entrega sus riquezas y joyas a quien
recorre los campos de guerra
empuñando la aniquilación.

Señor de la Muralla ... (ver texto completo)
María Ángeles Maeso

Como gotas de sangre los frutos de las moreras...

Con qué cara llorar en el teatro
César Vallejo

Como gotas de sangre los frutos de las moreras
pesan
y las doblan hacia el cristal. ... (ver texto completo)
¿En uno de cada cuántos brotes
atosiga un presagio de tijeras?
Esas yemas, ignoradas por la escarcha,
nominadas por el pulso eléctrico de los cintos.

Será porque ya ha llegado
el tiempo del orfelinato,
por lo que yo no puedo recordar
sin pértiga de salto a los espejos.
... (ver texto completo)