Es un buen ejemplo de transición del
románico al
gótico.
Los tres
ábsides de la cabecera y la
portada principal son románicos, mientras que en el siglo XIII se estructuraron las tres naves, cubiertas con
bóveda de crucería simple y en el siglo XIV se levantó la
torre cuadrada.
En el tímpano de la portada principal (siglo XVII) está representado el apóstol Santiago descansando sobre una concha que simboliza la Ruta Jacobea.