Y la Valdorba me recibe...
Camino en silencio, sola, meditando cada paso, dando gracias a Dios por este milagro. ¡Tantas veces "me ví" en este lugar! Y por fin, fue realidad. ¡Qué majestuoso, imponente, admirable, único! Valdorba es bello... es único... es la tierra donde nacieron mis abuelos... es el lugar donde comenzó la
historia familiar.