VIGO: LAS ISLAS CIES...

LAS ISLAS CIES
La naturaleza viva
se despierta en su semblante,
y es algo que te motiva
como un lugar delirante.

Naturaleza formada
entre eucaliptos constantes,
árboles que marcan vida
siendo testigos variantes.

Playas que alegran sus sendas
entre piedras milenarias,
algunas de sus veredas
son rutas extraordinarias.

Y Las Cies como testigos
de este Atlántico grandioso,
donde pasaron los siglos
en este lugar hermoso.

Piedras que forman barreras
de sus olas formidables,
lluvias que son placenteras
en días interminables.

Piedras que marcan caminos
en balcones y senderos,
islas que tienen sus signos
entre vientos pasajeros.

Faros que siguen erguidos
aguantando fuertes vientos,
parecen comprometidos
con marinos de otros tiempos.

Las Islas tienen semblante
de ser cobijo y silencio,
hablan que en cualquier instante
le ponen un alto precio.

Silencios rotos por olas
con sonidos marineros,
sus piedras son el rompeolas
de gestos aventureros.
G X Cantalapiedra.