En su forma actual el templo se inicia por la cabecera hacia 1310, desarrollándose la construcción en las siguientes décadas. Ya hacia los pies de la nave se encaja, en su lado de la epístola, una primera
capilla, dedicada a
Santa Lucia, que debe de corresponder, en la arcada que le da ingreso, a finales del siglo XIII, lo que nos remite a la existencia de una
iglesia anterior a la actual de la que, también, debía de formar parte algo de la
portada. La construcción de esta capilla de Santa Lucia, en lo demás, ha de datarse en el último cuarto del siglo XIV. En tanto la contrábsidal, del lado de la epístola, ha de entenderse como un añadido que nos remite al siglo XV.