Aquí en la Curva de Tomate eran frecuentes los accidentes, incluso cuando la gente estaba tomando el fresco a los mediodías, de vez en cuando venía algún motorista lanzado, los que estaban sentados en los últimos peldaños, tenían que salir corriendo. Era la época de ángel Nieto, y también había muchos forofos de la velocidad. Recordamos a Calahorra, a Bito del tío Ruel, y otros tantos que fueron los primeros moteros del pueblo, con sus Bultazo, sus Montesas, luego ya vinimos los descafeinados con las Derbis de 49, yo aún conservo la mía, cuando voy en verano voy con ella a por agua a la fuente de arriba.
JR.
JR.
