Esta es un vista del río Sil, en dirección a Los Peares, desde el puente de Paradela, donde cruza la carretera de Monforte a Castro Caldelas. A la derecha de la foto, se distingue claramente en lo alto, la llamada Pena do Castelo, de Doade de Amandi, a la que hace referencia Joaquín Arias Sanjurjo en su artículo del tomo 5 del Boletín de la Comisión de Monumentos de Orense, en el que da noticias de su excursión a la Ribera Sagrada en 1914. En la Pena hubo en tiempos una torre de la que ya nada queda, salvo algunos trozos de tejas y unos vestigios del foso que la defendía. Al pie de la Pena, justo por la parte que desde aquí se ve, estuvo la capilla de San Amaro, de la que nada queda tampoco. Arias Sanjurjo se hace eco de los dos grandes agujeros que tiene la Pena, que él no tuvo tiempo de explorar, y aventura si serán la entrada de una caverna prehistórica. La respuesta es negativa. A pesar del espectacular aspecto que muestran desde abajo, una vez que se sube hasta ellos se encuentra uno con la decepcionante verdad de que su profundidad no sobrepasa los 80 o 90 centímetros.
Antonio G. Rodicio (arodicio@usc.es).
Antonio G. Rodicio (arodicio@usc.es).
