Como sabéis, el fin de semana estuve en Vilavella, todo perfecto.
El sábado hice algunas de las muchas cosas que allì hay por hacer, eso sí, bien alimentado con esa empanada inigualable que hacen Toño y Celia (Panadería Blanco)
Hablé con alguna gente que hacía tiempo que no veía. Por la noche, la obligada visita a Marisol.
Pero el culmen del fin de semana fué el domingo. Un día claro, con buena temperatura, me fuí a Viana a visitar a mi hermana, como estba previsto, y de
paso...: Ya sé lo que estáis pensando algunos, pue sí, fuí a comer el último BOTELO de la temporada, ¡manma mía, como estaba!, una auténtica delicia; acompañado previamente de buen jamón y de chorizos hechos por mi hermana Pura de forma totalmente artesanal, todo esto regado con un buen vino tinto, también casero. ¡Uhf!.
Hablando de estas viandas me entró hambre...
Hasta luego.
El sábado hice algunas de las muchas cosas que allì hay por hacer, eso sí, bien alimentado con esa empanada inigualable que hacen Toño y Celia (Panadería Blanco)
Hablé con alguna gente que hacía tiempo que no veía. Por la noche, la obligada visita a Marisol.
Pero el culmen del fin de semana fué el domingo. Un día claro, con buena temperatura, me fuí a Viana a visitar a mi hermana, como estba previsto, y de
paso...: Ya sé lo que estáis pensando algunos, pue sí, fuí a comer el último BOTELO de la temporada, ¡manma mía, como estaba!, una auténtica delicia; acompañado previamente de buen jamón y de chorizos hechos por mi hermana Pura de forma totalmente artesanal, todo esto regado con un buen vino tinto, también casero. ¡Uhf!.
Hablando de estas viandas me entró hambre...
Hasta luego.