No recuerdo a este hombre, pero he oido hablar mucho de él y de sus azañas, de su nobleza, y también de algunas de sus acciones.
Una de esas "cousas do Taborelo", ocurrió un dia culquiera, cuando, junto con su familia, fue a buscar un carro de leña; era costumbre "soltar" la pareja para que pastara junto con el resto del ganado, mientras se preparaba la leña y se cargaba el carro.
A la caida de la tarde, se procedía a "xunxir"la pareja que debería traer el carro. Aquí es donde empieza la "fiesta": Uno de los miembros de esa pareja era un buey que tenía, por sus años, mucha malicia; cuando el Taborelo saca el yugo, el buey que lo ve y se larga para casa. Este hombre, cabreado, mas bien"encendido", por su fuerte carácter, le sigue hasta la cuadra, conteniendo su ira, se acerca al buey, lo ata con una cadena bien gruesa, agarra la "tranca" de la puerta..... el resto ya os lo imagináis, cada vez que le gritaba, el buey se arrimaba a la pared acoj... asustado; en un momento dado se le acerca, lo agarra por un cuerno, con la otra mano le coje una oreja y se la muerde con toda sus fuerzas: Satisfecho, dirigiéndose al buey, pronuncia una frase que aun se recuerda hoy:"En inteligencia gánasme, pero en forza fódeste".
Real como la vida misma.
Un abrazo a todos.
Una de esas "cousas do Taborelo", ocurrió un dia culquiera, cuando, junto con su familia, fue a buscar un carro de leña; era costumbre "soltar" la pareja para que pastara junto con el resto del ganado, mientras se preparaba la leña y se cargaba el carro.
A la caida de la tarde, se procedía a "xunxir"la pareja que debería traer el carro. Aquí es donde empieza la "fiesta": Uno de los miembros de esa pareja era un buey que tenía, por sus años, mucha malicia; cuando el Taborelo saca el yugo, el buey que lo ve y se larga para casa. Este hombre, cabreado, mas bien"encendido", por su fuerte carácter, le sigue hasta la cuadra, conteniendo su ira, se acerca al buey, lo ata con una cadena bien gruesa, agarra la "tranca" de la puerta..... el resto ya os lo imagináis, cada vez que le gritaba, el buey se arrimaba a la pared acoj... asustado; en un momento dado se le acerca, lo agarra por un cuerno, con la otra mano le coje una oreja y se la muerde con toda sus fuerzas: Satisfecho, dirigiéndose al buey, pronuncia una frase que aun se recuerda hoy:"En inteligencia gánasme, pero en forza fódeste".
Real como la vida misma.
Un abrazo a todos.