La impresionante
Torre de Hércules, construida en el siglo I y declarada Patrimonio de la Humanidad en 2009, es el único
faro romano y el más antiguo del mundo en funcionamiento. Cuenta la leyenda que Hércules llegó a las costas que rodean la Torre y enterró aquí la cabeza del
gigante Gerión, después de vencerle en combate.