La crisis demográfica no cruza la frontera. Mientras los municipios de la comunidad pierden población, la colonia gallega en el exterior no deja de crecer. La histórica cifra de posibles votantes gallegos en el extranjero se alcanza en las primeras elecciones generales en las que la emigración tiene que pedir el voto si quiere participar. Desde las generales de 2008, el número de gallegos inscritos en el Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA) se ha disparado un 16,4%: de 327.823 en 2008 a los cerca de 382.000 de noviembre. En cuanto a la evolución desde las municipales de mayo pasado, el número de gallegos inscritos en el CERA se incrementó en más de 4.500 nuevos electores: una media de 750 altas cada mes. Pero si se tiene en cuenta la cifra de electores en el exterior convocados en las municipales de 2007 –320.543– el incremento se dispara al 19%.
