Me toca mover.
Cuando se acepta un gambito, hay que atenerse a las consecuencias y aquel primer anzuelo de otro pescador, fue mordido cual gambito, claro está voluntariamente.Dada su agresiva posición, haré una Nimzoindina.
Estimado EMIGRANTE, quien quiera que sea y donde quiera que esté, sea usted o no el emigrante de siempre, aunque fuese usted mi mismísimo padre, quisiera preguntarle que como se atreve a elaborar con ese desparpajo tantos juicios de valor sobre mí.
Se permite definirme cual "ira de Dios" y con una convicción que realmente me confunde.Si lo hace como represalia por aquello de que yo a usted le tilde de solidario, me parece que su postura es desmedida.
Fíjese que con mi repuesta, alimento una de sus descripciones hacía mí cuando me retrata como soberbio y altivo por eso de no estar cerca de la humildad completa. La verdad, no suelo despreciar a las personas, ni siquiera con mis gestos.
Usted insinúa con cierto descaro que conoce al que escribe sobre este teclado, eso me parece aceptable pero el resto de sus consideraciones sobre mí, no las entiendo y mucho menos las comparto.
House, al que se le dibuja como genial médico clarividente, el mismo actor que hacía de ladrón en la película de 101 dálmatas, presenta claros signos de deshumanización cuando maneja a sus ignorantes pacientes con su clara y a la vez viperina lengua. Los casos clínicos de House no siempre tiene solución gracias a Dios.
Le ofrezco tablas, no siga por este camino, si está usted en disposición de hablar de nuestro pueblo, ya sabe, de Santa Cruz, más ayá del bache que hay en una de las entradas y más ayá de las mejoras que propone y ya conocemos, estaré a su disposición.
Un saludo.
Oropéndola.
Cuando se acepta un gambito, hay que atenerse a las consecuencias y aquel primer anzuelo de otro pescador, fue mordido cual gambito, claro está voluntariamente.Dada su agresiva posición, haré una Nimzoindina.
Estimado EMIGRANTE, quien quiera que sea y donde quiera que esté, sea usted o no el emigrante de siempre, aunque fuese usted mi mismísimo padre, quisiera preguntarle que como se atreve a elaborar con ese desparpajo tantos juicios de valor sobre mí.
Se permite definirme cual "ira de Dios" y con una convicción que realmente me confunde.Si lo hace como represalia por aquello de que yo a usted le tilde de solidario, me parece que su postura es desmedida.
Fíjese que con mi repuesta, alimento una de sus descripciones hacía mí cuando me retrata como soberbio y altivo por eso de no estar cerca de la humildad completa. La verdad, no suelo despreciar a las personas, ni siquiera con mis gestos.
Usted insinúa con cierto descaro que conoce al que escribe sobre este teclado, eso me parece aceptable pero el resto de sus consideraciones sobre mí, no las entiendo y mucho menos las comparto.
House, al que se le dibuja como genial médico clarividente, el mismo actor que hacía de ladrón en la película de 101 dálmatas, presenta claros signos de deshumanización cuando maneja a sus ignorantes pacientes con su clara y a la vez viperina lengua. Los casos clínicos de House no siempre tiene solución gracias a Dios.
Le ofrezco tablas, no siga por este camino, si está usted en disposición de hablar de nuestro pueblo, ya sabe, de Santa Cruz, más ayá del bache que hay en una de las entradas y más ayá de las mejoras que propone y ya conocemos, estaré a su disposición.
Un saludo.
Oropéndola.