Casa Museo o Museo de la Inquisición, GARGANTA LA OLLA

Casi en el medio de la fachada Noroeste de la Plaza se encuentra la calle Toril y en ella la Casa Museo o Museo de la Inquisición de propiedad privada. El amplio y elevado porche "de este edificio, está sostenido por una fuerte columna granítica y su base traída por alguna remodelación de la casa, ya que según el texto fue la base de una cruz. "Esta cruz (está el signo de la cruz) se hizo siendo capitán Iván Muñoz, familiar S. F. (Santo Oficio), oficiales Rafael Martín. Año 1606". Fue antigua residencia de los Condes de Acevedo. Carlos V le concedió al hijo mayor de éstos el título de Escribano Real, con derecho a transmitírselo a sus descendientes como muestra de agradecimiento por el buen trato recibido de los garganteños. Este museo, aunque más que un museo de la Inquisición, es también un museo etnográfico ya que en su interior también podemos encontrar utensilios y enseres de la vida cotidiana de la localidad, como una cocina tradicional verata con los enseres típicos de matanza.
Entramos al Museo de la Inquisición Garganta la Olla y nos encontramos un patio de piedra y madera. Este da lugar al resto de salas del museo de la inquisición: los calabozos, sala de tortura, sala de juicios, el despacho del inquisidor etc. Dentro del museo podrás ver utensilios y enseres de la vida cotidiana de la localidad, como una cocina tradicional verata con los enseres típicos de matanza.
El Museo de la Inquisicion dispone de un despacho para el inquisidor y una sala de juicios. En estas salas se guardaban los documentos importantes del Santo Oficio. Y se juzgaban y condenaban a los presos.
En la segunda planta está el balcón donde se colgaba al preso. Justo al lado se encuentra la sala de tortura con utensilios y máquinas propios para el sufrimiento de los interrogados. Esta sala era usada para torturar a los presos. En ella podrás ver instrumentos de tortura como la Garrucha, Potros, Guillotina, Garrote Vil, Dama de Hierro y muchos más.
Desde el patio se accede a los calabozos. Se encuentran bajo el nivel de la calle por lo que son oscuros, fríos y húmedos. Aquí se encerraban a los presos, en estos calabozos tambien podemos ver herramientas de tortura.