Pedro ahí va esto:
Escarrapachao como un chinche encima de la albarda
Cuatro cántaros de lata llevabas,
Aunque los cuatro de leche llenabas, por eso el burro no se arruñaba.
De vuelta a
casa y tirando del cabresto al burrino,
Te enredabas a tirarle
piedras, a las cogutas que había en el
camino.
Un saludo. Domingo.