Periquín silvió en madrid, en capitania general al lao de la cat-tellana. Pedro et-taba dettinao de correo y llebava una balija con lot recaoh del un sitio pal otro, de lat cosah esah de lot generaleh y loh coroneleh... Pedro era buen mozo y en cuanto que pudieron lo vit-tieron elegante, con un abrigón lalgo y una gorra de prato con un monton de insiniah del ejelcito. Una noche dice que diva periquin andando pol la calle y va y se le para un coche lalgo como un avión que le decian un aiga jut-to al lao, no hace mat que abajal el ventanillo y quien era el fulano, ni mat ni menoh que franco, que ni colto ni perezoso se dirige a pedro y le pregunta... que tal et-tah pedro, te tratan bien en el ejelcito? y pedro, ni dalse impoltancia ni ná va y le contet-ta, YO MU BIEN MY GENERAL, MU CONTENTO... pues malegro contestó su etcelencia, ya sabes si necesitah algo... a lat suh oldeneh mi general, el coche abajo el ventanillo y se malcho en la noche de madrí de la potguerra. pedro como et-taba acot-tumbrao a et-tah cosah NI DAL-LE IMPOLTANCIA OLLE.
entrañable periquin.
entrañable periquin.