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SAN PEDRO DE MERIDA: A fin de cuentas, todo es un chiste.

Un alma grande está por encima de la injuria, de la injusticia y el dolor.

Todo lo verdaderamente grande pertenece a la humanidad entera.

Cuando dos elefantes se pelean es la hierba la que sufre.

Tener hijos no le convierte a uno en padre, del mismo modo en que
tener un piano no le vuelve pianista.

Hay dos clases de hombres: quienes hacen la historia y quienes la padecen.

Todo el honor de las mujeres consiste en la buena opinión que de ellas se tiene.

A fin de cuentas, todo es un chiste.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
La justicia es más lenta que el pensamiento de una tortuga