Recuperándome poquito o a poco del hartazgo de ironías, sutilezas, cinismo e hipocresía al que he asistido impávido lo que va de semana en el Gran Teatro de las Cortes, donde un elenco artístico regularmente cualificado, nos ha ofrecido a los españolitos del montón una de sus representaciones anuales de mayor hondura y enjundia. Pasada ya las valoraciones que los muy sesudos cronistas al servicio del Poderoso Caballero nos han ofrecido de la representación; vuelvo al acogedor refugio que me ofrecen ... (ver texto completo)
Chacho Teddy, eres un crac, un peazo tío más grande que el Teide con su volcán y todo.
Yo presumo su inocencia
pero dice el señor juez
que no es una menudencia
lo que ha mangado usted
siendo solo como es,
un canario de Canaria
que mutó a buitre después.
Si en el cómodo cubil
donde están sus posaderas
en premio por ser tan vil,
para echar las horas fuera
musiquita ha de oír,
a su portero sugiero
que le pase una factura
como usted me pasó a mi
con toda su cara dura.
Yo presumo su inocencia
y la del señor Millet,
que verá con complacencia
que se escurra su merced
porque usa su opulencia
tal como usa y usó él.
De Judas fue su papel
en aquél Superestar
y aprendió a representar
con tal soltura y tan bien,
que ha conseguido engañar
a la cándida sociedad
que le puso en el pedestal
donde se mamaba más.
Ha sido su atracón tal,
que creo debe vomitar
todo lo que chupó demás
y además, reposar del malestar
que le causó la indigestión
de tanto arrobar y arrobar
y arrobar y punto com.
Pero yo confío en vos, señor,
pues lo veo como un bendito
en su bien cortado trajecito
de oscuro color buitrado
en que mutó el canarito.
Como en todas partes se paga,
la luz el gas y hasta el agua,
deseo que pague su grandeza
al pon pon y con presteza
esos 400.000.000 del ala
que distrajo con ligereza
y se pase buenos veranos
a la sombra con entereza
Salud. ... (ver texto completo)
Yo presumo su inocencia
pero dice el señor juez
que no es una menudencia
lo que ha mangado usted
siendo solo como es,
un canario de Canaria
que mutó a buitre después.
Si en el cómodo cubil
donde están sus posaderas
en premio por ser tan vil,
para echar las horas fuera
musiquita ha de oír,
a su portero sugiero
que le pase una factura
como usted me pasó a mi
con toda su cara dura.
Yo presumo su inocencia
y la del señor Millet,
que verá con complacencia
que se escurra su merced
porque usa su opulencia
tal como usa y usó él.
De Judas fue su papel
en aquél Superestar
y aprendió a representar
con tal soltura y tan bien,
que ha conseguido engañar
a la cándida sociedad
que le puso en el pedestal
donde se mamaba más.
Ha sido su atracón tal,
que creo debe vomitar
todo lo que chupó demás
y además, reposar del malestar
que le causó la indigestión
de tanto arrobar y arrobar
y arrobar y punto com.
Pero yo confío en vos, señor,
pues lo veo como un bendito
en su bien cortado trajecito
de oscuro color buitrado
en que mutó el canarito.
Como en todas partes se paga,
la luz el gas y hasta el agua,
deseo que pague su grandeza
al pon pon y con presteza
esos 400.000.000 del ala
que distrajo con ligereza
y se pase buenos veranos
a la sombra con entereza
Salud. ... (ver texto completo)