Recuerdo que un día lejano en el tiempo subí "Al Castillo", junto con varios amigos. Uno de ellos ya falleció, por desgracia, era mi mejor amigo. Se llamaba Manuel E. Y en aquellos momentos, con todo un panorama ante nosotros y casi medio término del Pueblo de frente, comenzamos a reccordar la ñiñez, la infancia y las injusticias habidas en aquella época.
Yo le recordaba la educacion recibida por el maestro, a base de palos de insultos. Era un maestro "FASCISTA", que utilizaba a los alumnos aventajados para darle clase a los más pequeños. Este maestro se llamaba de. Luis Garias, pongo el apellido, para distingirlo de otro maestro, casi condiscípulo mío, que era un señor maestro, preocupado por sus alumnos y en definitiva, una gran persona, católico y ejeplar padre de familia: Sr. Romero Vázquez.
También se habló sobre la época "fascista" que nos tocó vivir, en lo referente al trabajo de los hombres subyugados por el sólo miramiento de llevar un sueldo a sus casas para criar a sus hijos. Sobre ésto habría mucho que hablar, pero mas elocuente es visto por los ojos de un niño. Los míseros jornales de la siega, la "zacha", arrancar garbanzos etc. Todo se habló desde este Castillo, tan querido y tanlejos de mí.-.
Yo le recordaba la educacion recibida por el maestro, a base de palos de insultos. Era un maestro "FASCISTA", que utilizaba a los alumnos aventajados para darle clase a los más pequeños. Este maestro se llamaba de. Luis Garias, pongo el apellido, para distingirlo de otro maestro, casi condiscípulo mío, que era un señor maestro, preocupado por sus alumnos y en definitiva, una gran persona, católico y ejeplar padre de familia: Sr. Romero Vázquez.
También se habló sobre la época "fascista" que nos tocó vivir, en lo referente al trabajo de los hombres subyugados por el sólo miramiento de llevar un sueldo a sus casas para criar a sus hijos. Sobre ésto habría mucho que hablar, pero mas elocuente es visto por los ojos de un niño. Los míseros jornales de la siega, la "zacha", arrancar garbanzos etc. Todo se habló desde este Castillo, tan querido y tanlejos de mí.-.
